«Nos estamos regocijando con el pueblo de Liberia. Deseamos al presidente Weah todo el éxito que se merece», ha manifestado durante el acto, felicitando a la población «por unas elecciones creíbles y pacíficas».
Así, ha dicho que estas elecciones «lograron que, por primera vez en Liberia, un gobierno civil haya dado paso a otro gobierno civil».
Weah ha tomado posesión del cargo tras vencer en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales del 26 de diciembre, en las que se impuso por un amplio margen al oficialista Joseph Boakai. La ceremonia ha estado marcada por las promesas de lucha contra la corrupción.
Decenas de miles de eufóricos seguidores de Weah han asistido al acto, celebrado en el Estadio Samuel Doe de la capital, Monrovia, en uno de cuyos suburbios creció el ahora presidente.
«He pasado muchos años de mi vida en estadios, pero hoy el sentimiento no tiene parangón», ha proclamado Weah, vestido con una túnica tradicional africana, según la cadena de televisión británica BBC.
«Mi deber es liderar este país y llevarlo de la división a la unidad. No os abandonaré (…). Creo que la forma más eficaz de mejorar la vida de los pobres y reducir la brecha entre los ricos y los pobres es asegurarnos de que los recursos públicos no terminan en los bolsillos de los cargos públicos», ha añadido.
También han estado otros presidentes africanos para asistir al que se ha convertido ya en el primer traspaso pacífico de poder en el país de las últimas siete décadas. Entre ellos estaban los mandatarios de Gabón, Ghana, Togo, Sierra Leona, Guinea, República del Congo, Senegal, Malí y Burkina Faso.
En su intervención, Weah se ha comprometido a cumplir las promesas de campaña y ha dado las gracias a su predecesora, Ellen Johnson Sirleaf, por «sentar los cimientos en los que nos erguimos ahora en paz», tras años de guerra civil.
Los jóvenes y los más desfavorecidos fueron la base que cimentó la clara victoria de Weah en los comicios y muchos de ellos han hecho cola durante horas para poder asistir a la ceremonia.
«No debemos permitir que la lealtad política nos impida colaborar en pro del interés nacional (…). La sangre no debería ser nunca el precio de la democracia (…). Esta transición ha sido resultado de (…) la voluntad democrática del pueblo liberiano», ha advertido Weah.
Liberia es la primera república africana moderna y se formó con los esclavos africanos liberados retornados de Estados Unidos. Sin embargo, en las décadas de 1980 y 1990, el país quedó asolado por dos guerras civiles extremadamente crueles.