El organismo, con sede en Londres e informantes en el país árabe, ha indicado que el convoy estaba siendo escoltado por las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), una coalición de milicias encabezada por las kurdas Unidades de Protección Popular (YPG).
El ataque ha sido ejecutado en los alrededores de la localidad de Shadadi, situada en el sur de la provincia. Según el observatorio, las cinco víctimas mortales serían integrantes de las FDS. Estados Unidos no se ha pronunciado al respecto.
Por el momento ningún grupo ha reclamado la autoría del atentado, que llega menos de una semana después de la muerte de 16 personas –entre ellas cuatro estadounidenses– en un ataque reivindicado por el grupo yihadista Estado Islámico en la ciudad de Manbij (norte).
Las FDS anunciaron tras dicho ataque que incrementarían sus operaciones contra Estado Islámico. Por su parte, el vicepresidente del país norteamericano, Mike Pence, condenó el ataque y resaltó que Estado Islámico ha sido «machacado».
El grupo yihadista ha quedado recluido en algunos puntos de la provincia siria de Deir Ezzor (este) en la orilla oriental del río Éufrates, cerca de la frontera con Irak –donde fue derrotado militarmente a final de 2017–, y zonas del desierto sirio.