Manuel Valls se enfrenta al descontento de sindicatos y trabajadores. Los principales sindicatos franceses han acusado al ejecutivo galo de ceder ante la patronal de trabajadores, Medef, en relación cambios en la ley laboral y jubilación.
Este lunes, el gobierno de Manuel Valls acordó aplazar parcialmente la implantación de una modificación de la Ley de Trabajo, que pretende aplicar un sistema de puntos por el cual aquellos con trabajos duros puedan acceder a una jubilación anticipada.
En principio, la ley establecería que aquellos trabajadores que tengan empleos que supongan un perjuicio a su salud y que reduzcan su esperanza de vida recibirían puntos para poder jubilarse antes.
Ante la amenaza de la patronal, Medef, de no asistir a la próxima »Conferencia Social», el 7 y 8 de julio, Valls anunció, en una entrevista en »Les Echos», un aplazamiento parcial de la ley. De los 10 criterios que preveía la ley, sólo se aplicarán en 2015 cuatro. Ahora son los sindicatos los que amenazan con boicotear el evento, que tenía previsto reunir a gobierno, patronal y sindicatos para discutir el empleo.
Los sindicatos galos han condenado unánimemente este aplazamiento, acusando al primer ministro de “una ruptura en términos de diálogo social”, y expresarán su protesta boicoteando la Conferencia social que se celebrará el 7 y 8 de julio.
¿En qué consisten los cambios en la ley?
Los trabajadores con empleos que afecten a su salud obtienen puntos cada trimestre que luego acumulan y utilizan para adelantar su jubilación. Cada diez puntos acumulados, se adelanta la jubilación tres meses. Quedan por definir con qué criterios se pueden acoger los trabajadores a la ley, como, por ejemplo, a partir de cuantos kilos de carga por trabajador estos afectan a su salud. La ley está abierta a tanto empleados públicos como del sector privado.