Keita, que ya se impuso a Cissé en las elecciones de 2013, obtiene así un segundo mandato al frente del país, si bien el resultado aún debe ser validado por el Tribunal Constitucional. En cuanto a la participación en la votación del domingo, en un país donde la inseguridad en el norte y el centro van en aumento, se situó en el 34,84 por ciento, según MaliActu.
Al contrario que en las anteriores elecciones, en las que Cissé reconoció la victoria de Keita antes del anuncio oficial de los resultados, en esta ocasión el candidato opositor adelantó el lunes que no aceptaría los resultados, denunciando fraude. Según dijo, los datos compilados por su partido le daban a él la victoria.
Keita ganó la primera vuelta celebrada el pasado 30 de julio con el 41,70 por ciento de los votos, mientras que Cissé obtuvo el 17,78 por ciento. El presidente partía como claro favorito, habida cuenta de que el candidato opositor no obtuvo el respaldo de los principales perdedores en la primera vuelta.