A las puertas de Europa, Libia se ha convertido en un nuevo foco yihadista que preocupa tanto a los europeos como a los países norteafricanos, temerosos de su influencia en los grupos radicales de sus territorios. Al contrario de Irak y de Siria, donde una coalición internacional bombardea al grupo Estado Islámico (EI), su brazo libio tiene vía libre debido al caos en el que está sumido el país.
Según señala el diario libanés The Daily Star, los terroristas de Estado Islámico controlan la ciudad de Sirte, situada en la costa mediterránea. Se trata de una ciudad conocida y de importancia simbólica dado que en ella nación el ex dictador Muamar Gadafi.
«Todos los días abren fuego contra nosotros«; señala Abu Shebar, comandante en Sirte que dirige la operación contra los yihadistas. No obstante, los intentos por detenerles están siendo inútiles dado que los terroristas se encuentran a menos de un kilómetro de la ciudad de Sirte. Los terroristas esperan a las puertas de la ciudad con artillería pesada y armas, según señala el comandante libio.
La Libia post Gadafi no cuenta con un gobierno estable. Hay protestas, caos generalizado, varias milicias, células terroristas y señores de la guerra que se reparten el territorio. Esta situación que hace que los yihadistas se desplacen libremente por el desierto libio. Un inmenso espacio que ocupa la zona occidental del Nilo en Egipto, la zona oriental de Libia y el noroeste de Sudán y que cubre un área de 1.100.000 km cuadrados.
Las victorias en Libia de Estado Islámico preocupan mucho a la comunidad internacional, ya que el país se sitúa a escasos 400 kilómetros de Italia. Además, el miedo al avance de los terroristas supone otro causa para que la gente decida echarse al mar y cruzar la frontera.
El EI, con presencia en Derna, Sabrata y Sirte
La filial libia del grupo EI está asentada en varias ciudades, desde Derna (este) a Sabrata (oeste), pasando por Sirte (centro).
Otro grupo yihadista, Ansar al Sharia, está implantado en Bengasi, segunda ciudad del país.
El EI dispone también en Libia de un acceso al mar, en un país que constituye la principal fuente de inmigración irregular hacia las costas europeas, y sobre todo hacia Italia.
Los países vecinos también temen a los yihadistas. Egipto, que ya combate a los extremistas en la península del Sinaí, decidió actuar y bombardeó posiciones del EI tras la ejecución de coptos en Libia.
Las autoridades argelinas también están alarmadas, porque «estos grupos tienen como principal objetivo Argelia, así como Túnez