El Ministerio del Interior ha resaltado que estas personas «serán llevadas ante las autoridades judiciales», sin detallar a qué castigos se exponen, según ha recogido el portal local de noticias Iraqi News.
Asimismo, ha hecho hincapié en la obligación del cierre de las tiendas de venta de alcohol y restaurantes y cafeterías durante los periodos de ayuno, con excepción de aquellos restaurantes que estén en fábricas, hostales de estudiantes y aquellos destinados a turistas.
El mes de Ramadán arrancó en Irak y la mayoría de los países musulmanes el 17 de mayo, y hasta su finalización los musulmanes practicantes deben realizar ayuno y abstenerse de beber, mantener relaciones sexuales durante las horas de luz: del alba hasta la puesta de sol.
Los niños y las mujeres con la menstruación o que aún no se hayan recuperado de un parto reciente pueden saltarse el ramadán, aunque éstas deberán «compensar» los días que no ayunen a lo largo del año.
Lo mismo ocurre con los enfermos y aquellos que estén de viaje durante estas fechas: pueden retrasar su ayuno, pero deberán cumplirlo otros días antes de que acabe el año.