El director de la petrolera estatal iraquí South Oil Company, Ihsan Abdul Jabbar, ha confirmado que la producción de barriles se mantiene en los 440.000 al día y que la evacuación es «una medida de precaución y temporal».
«No tenemos constancia de peligro alguno, la situación en el yacimiento es segura y muy estable, y estamos funcionando a plena capacidad», ha hecho saber el encargado.
«Los empleados extranjeros proporcionaban asesoramiento desde las oficinas de Dubái. La producción está gestionada por ingenieros iraquíes», ha añadido.
Según fuentes de DPA, otras compañías extranjeras que operan en la región, origen del 90 por ciento de la producción de crudo en Irak, también están preparando una evacuación. Entre las petroleras que se encuentran allí se encuentran la angloholandesa Shell, la británica BP, la rusa Lukoil y la italiana Eni.