El portavoz de la UNAMID, Ashraf Eissa, ha confirmado que la misión «ha recibido una nota verbal» de Jartum respecto a dicha estrategia de salida, contemplada en la resolución 2173 del Consejo de Seguridad.
La citada resolución, aprobada en agosto, extendió el mandato de la misión durante diez meses y hacía hincapié en la protección de los civiles evolucionando hacia una labor más preventiva, con el despliegue militar y el patrullaje activo en zonas más propensas a conflictos y a actos violentos contra civiles.
El Consejo de Seguridad aprobó también una ligera reducción del contingente militar y de policía, que tendrá ahora un máximo de 15.845 efectivos militares y 1.583 efectivos de policía, entre otras unidades dedicadas a la seguridad.
Las tensiones entre el Gobierno sudanés y la UNAMID se enmarcan en las investigaciones de la misión sobre las presuntas violaciones en masa sufridas por cerca de 200 mujeres y niñas en la región. A pesar de que no ha encontrado pruebas por el momento, ha prometido seguir analizando el asunto.
El conflicto de Darfur ha acabado con la vida de más de 300.000 personas y ha desplazado a otros dos millones, de acuerdo con la información de Naciones Unidas.