La reelección del primer ministro conservador, David Cameron tuvo una consecuencia importante: la celebración del referéndum sobre la permanencia de Reino Unido en la Unión Europa. Cameron ganó pero Europa perdió. Cuando se cumplen 20 días de las elecciones británicas, el premier ha iniciado una gira relámpago por cuatro capitales europeas para renegociar las relación de Reino Unido con la UE. Aunque, no hay fecha exacta para el referéndum, se sabe que tendrá lugar antes de que acabe 2017.
¿Qué cambios quiere el primer ministro? Cameron sostiene que la UE ha crecido mucho y se ha arrogado demasiados poderes, y reclama la devolución de competencias a Londres para apoyar que siga perteneciendo al bloque.
Los conservadores culpan a Bruselas del aumento de la inmigración y quieren poder imponer límites, tanto a las llegadas como a los derechos a cobrar subsidios de los recién llegados, algo que cuestionaría los principios de libre circulación y de no discriminación que rigen en la UE.
Cualquier enmienda a los tratados europeos tendría que ser votada en referéndum a su vez en varios países, algo que los socios europeos no parecen dispuestos a aceptar.
El documento Índice de la Reforma de la UE, publicado por el think tank Open Europe, enumera y puntúa 30 propuestas que Londres puede plantear a sus socios. La treintena de propuesta se dividen en cuatro grandes aparatados: derechos del bloque de Estados no adheridos al Euro; libre movimiento de trabajadores; responsabilidad democrática; y competitividad.
Este think tank señala que entre las competencias que pide Reino Unido estaría eliminar barreras a la economía dentro de la UE. Entre las principales está la expansión del Mercado Común en servicios, energía e industria digital. Aceleración de acuerdos con EEUU, Japón o India y menos trabas burocráticas de Bruselas.
Entre los limites a la circulación de personas, Londres quiere poner fin a las ayudas a europeos no británicos los cuatro primeros años de su llegada al país en áreas como vivienda y salarios. Además, se deportar a los que no encuentren empleo en seis meses.
Otra de las medidas que quiere introducir el gobierno conservador es derecho de veto sobre las medidas relacionadas con el Mercado Común. Así como proteger el sector financiero, en concreto la City londinense.