«Haré un comunicado sobre esta cuestión el próximo martes», ha declarado Erdogan, el día en que tendrá lugar una reunión de grupo de su partido Justicia y Desarrollo (AKP).
Se trata de la primera vez que Erdogan se pronunciará públicamente sobre la muerte del periodista saudí, en el consulado saudí de Estambul, el pasado 2 de octubre.
La última versión saudí reconoce que Jashogi murió durante un forcejeo con el personal de la Embajada, pero ONG y servicios de inteligencia internacionales, fuentes turcas incluidas, consideran que falleció durante un interrogatorio tras ser sobrepasado físicamente por varios individuos, en lo que se trataría de una ejecución extrajudicial.
El vicepresidente del AKP, Numan Kurtulmus, no ha dudado en señalar que las autoridades saudíes estaban al tanto de que Jashogi había sido retenido contra su voluntad y que conocían las consecuencias. «Un delito cometido en un consulado no puede llevarse a cabo sin el conocimiento de los altos funcionarios de ese país», ha dicho, en referencia a Arabia Saudí.
De momento, y según la cadena turca TRT, el fiscal jefe de Estambul ha llamado a otros 28 funcionarios del consulado saudí, incluidos ciudadanos turcos y extranjeros, para dar testimonio el lunes sobre lo ocurrido con Jashogi.