Los ataques han ocurrido en las localidades de Al Jayrat y Magayr, según ha precisado el jefe del Centro ruso para la Reconciliación en Siria, Victor Kupchishin, y en ellos participaron también «formaciones aliadas».
Ambas ofensivas procedían de la supuesta zona desmilitarizada que existe en la región de Idlib, bastión de los rebeldes sirios», de acuerdo con la misma fuente.
En el ataque participaron, junto a las fuerzas a pie, dos tanques, un transporte blindado y 13 todoterrenos dotados de ametralladoras pesadas.
«Los atacantes fueron dispersados por el fuego del Ejército sirio y se vieron obligados a retirarse», ha agregado Kupchishin antes de anunciar que la respuesta siria destruyó un transporte blindado, cinco todoterrenos y causó la muerte de más de 50 agresores.