Sólo un par de semanas después de que un grupo de 75 científicos tuviera que ser trasladado a un centro hospitalario para averiguar si se habían infectado tras haber estado expuestos a bacterias vivas de ántrax, se han descubierto en un almacén del campus del Instituto Nacional de Salud de Bethesda, en Maryland, varios viales de viruela, que datan de la década de los cincuenta, según publica este miércoles »The Washington Post».
Se ha confirmado que los viales contenían ADN del peligroso patógeno, aunque se necesitan varias semanas para determinar si el material estaba en estado vivo. Las muestras serán destruidas después de que los análisis finalicen. Por el momento no parece que ninguno de los viales se haya roto o que los trabajadores del laboratorio estuvieran expuestos a algún tipo de infección.
El laboratorio, en el que trabajan desde hace décadas los empleados de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés), no envió ninguna notificación a sus empleados hasta este martes por la tarde.
“Debido al potencial de la cuestión, en que se ve involucrada la bioseguridad, el FBI está trabajando para asegurar el envío y transporte seguro de los materiales”, ha asegurado el portavoz de los federales Christopher M. Allen, en un correo dirigido al periódico.
Es la primera vez que se descubre un virus mortal fuera de las dos únicas instalaciones del mundo donde se permiten almacenar los viales de viruela: el laboratorio de alta seguridad de Atlanta y un centro de investigación en biotecnología y virología en Novosibirsk, Rusia.
La viruela es, junto a la fiebre bovina, una de las dos únicas enfermedades que han sido totalmente erradicadas en todo el mundo y su potencial de infección es muy alto.