Las fuerzas americanas tomaron ventaja este martes de los bombardeos contra el grupo extremista Estado Islámico en Siria para intentar al mismo tiempo eliminar el liderazgo de una célula no relacionada con el grupo. Se trata de un grupo de veteranos de al Qaeda que, según la Casa Blanca, estaba preparando un ataque «inminente» contra EEUU o Europa.
El bombardeo en Siria estaba principalmente dirigido a EI, pero también se atacó a la poco conocida célula Khorasan, con la esperanza de paralizarla antes de que llevase a cabo un ataque en occidente. Se trata de un grupo afiliado a Al Nusra, la rama siria de Al Qaida, que se encontraba en el oeste de la provincia de Alepo.
Los agentes de inteligencias y fuerzas militares están todavía valorando el alcance de los bombardeos sobre territorios sirio. No obstante creen que alguno de los misiles pudo alcanzar a Muhsin al-Fadhli, líder de la célula Khorasan y que durante varios años fue confidente del que fuera el líder de AL Qaeda, Osama Bin Laden.
Según este diario, New York Times, esta célula había planeado un ataque con bombas indetectables en suelo estadounidense. Al parecer, el material explosivo podía introducirse en pasta de diente o ropa y se indetectable por los sistemas de seguridad. Las autoridades no especificaron cuándo hubiera tenido lugar el atentado.
Según señaló el Fiscal General, Eric Holder, precisamente las sospechas de que esta célula atentase fue el motivo que empujó a las autoridades a prohibir volar con ordenadores y teléfonos descargados.
Se trata del primer ataque de fuerzas extranjeras en Siria desde el inicio de la guerra civil en 2011, y el presidente estadounidense, Barack Obama, afirmó que su país hará «todo los que sea necesario» para derrotar al EI. Los bombardeos en Siria tuvieron «mucho éxito» según el Pentágono y causaron la muerte de al menos 120 yihadistas, 70 del Estados Islámico y 50 de Al Qaeda, y 300 heridos, indicó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
Navíos estadounidenses lanzaron 47 misiles Tomahawk, y se utilizaron cazabombarderos, drones y bombarderos que operan en el Mar Rojo y el Golfo, informó el Pentágono. El cazabombardero furtivo F-22 «Raptor», el más sofisticado del arsenal aéreo estadounidense, fue utilizado por primera vez.
Arabia Saudita, Bahrein, Catar, Emiratos Árabes Unidos y Jordania, colaboraron con EEUU
Turquía, que hasta ahora había manifestado que no iba a participar en las operaciones, afirmó que podría prestar apoyo logístico, en declaraciones del presidente Recep Tayyip Erdogan.
Por otro lado, el presidente sirio, Bashar al Asad, dijo por su parte que apoya «cualquier esfuerzo internacional» para combatir a los yihadistas. Esos ataques sin embargo deben tener en cuenta «el respeto de la soberanía nacional» y deben hacerse «en conformidad con la legislación internacional», advirtió su gobierno en un comunicado.