El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Raad al Husein, ha reclamado este lunes a Estados Unidos que ponga fin a su «inadmisible» política de separar a los hijos de los padres migrantes que entran en el país de forma irregular desde México, al tiempo que ha denunciado las graves violaciones de los Derechos Humanos que siguen registrándose en países como Corea del Norte y Birmania.
En su discurso de despedida del cargo ante el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, en Ginebra, Zeid ha subrayado que en Corea del Norte y en Birmania las violaciones de los Derechos Humanos siguen siendo una práctica generalizada y ha acusado a China de impedir que activistas independientes testifiquen ante organismos de Naciones Unidas.
En Siria, Zeid ha asegurado que se han cometido «horribles violaciones y abusos» de los Derechos Humanos «principalmente por parte del Gobierno y de sus aliados» pero también por parte de «extremistas violentos y sus seguidores».
En este sentido, ha denunciado que el régimen sirio ha rechazado autorizar el acceso a Siria de trabajadores de su oficina y de la Comisión de Investigación del Consejo de Derechos Humanos. «Nuestra supervisión remota extensiva de las violaciones de Derechos Humanos continuará», ha advertido.
El Alto Comisionado ha asegurado que en Birmania hay «claros indicios de ataques sistemáticos, generalizados y bien organizados» contra los rohingyas en el estado de Rajine, unas acciones que podrían llegar a ser consideradas «actos de genocidio» por parte de un tribunal.
En los estados del norte del país y en Kachin, Zeid ha dicho que la violencia ha vuelto a recrudecerse con nuevas denuncias de violaciones de Derechos Humanos, incluidas acusaciones de «asesinatos extrajudiciales, desapariciones forzadas, torturas, tratos inhumanos, violaciones y otras formas de violencia sexual», así como de «reclutamiento de niños en las Fuerzas Armadas y ataques desproporcionados e indiscriminados en los enfrentamientos entre fuerzas de seguridad y grupos armados».
«Aunque Birmania ha declarado que investigará las denuncias y perseguirá a los supuestos autores, sus acciones hasta la fecha no han cumplido los estándares mínimos de credibilidad e imparcialidad», ha asegurado.
En cuanto a la repatriación de rohingyas que ahora viven refugiados en Bangladesh, Zeid ha dejado claro que no debe realizarse este proceso sin que exista una supervisión de la situación de los Derechos Humanos «sobre el terreno».
PIDE LA APERTURA DE INVESTIGACIONES SOBRE VENEZUELA Y NICARAGUA
En relación a Venezuela, el Alto Comisionado para los Derechos Humanos ha afirmado que, «dada la gravedad» y el «alcance» de las violaciones de Derechos Humanos y la «continua negativa» a dar acceso al personal de su oficina, seguirá «supervisando la situación» e informando sobre lo sucedido.
«Creemos firmemente que el Consejo debe establecer una comisión de investigación», ha señalado. «Las autoridades han ignorado una larga lista de solicitudes de otros cuyos mandatos son especialmente relevantes para la actual crisis de Derechos Humanos en el país», ha añadido.
En cuanto a Nicaragua, Zeid ha manifestado su condena de la violencia que ha llevado a la muerte de 178 personas, «casi en su mayoría a manos de las fuerzas policiales y de grupos armados progubernamentales», y ha pedido la apertura de una investigación internacional. «Deploro la violencia, incluido el horrible ataque incendiario de hace dos días. La gravedad de estos hechos bien puede merecer una comisión de investigación internacional», ha señalado.
En relación a México, el Alto Comisionado ha lamentado que las autoridades mexicanas no permitan el acceso del Comité para las Desapariciones Forzadas, a pesar de que este organismo ha contabilizado más de 310 «acciones urgentes» en casos de desapariciones en este país, lo que pone más del 60 por ciento de todas las acciones pendientes.
En su discurso de despedida, Zeid ha denunciado a todos los países que han impedido la visita de expertos e investigadores de su oficina y ha reclamado que se permita el trabajo de los organismos de Naciones Unidas.
CRITICA LA FALTA DE COOPERACIÓN DE RUSIA
En este sentido, ha denunciado la falta de colaboración de Rusia, tanto en el caso de la península de Crimea, cuyo control arrebató a Ucrania y a la que no ha permitido el acceso de investigadores, como en el de la república de Chechenia, donde existen «graves acusaciones de violencia, discriminación y exclusión de los miembros de la comunidad LGBTI».
«En muchos países las personas LGBTI sufren una grave discriminación, a menudo por cauces oficiales, y en caso todas partes están inadecuadamente protegidos frente a la violencia y la intolerancia. Proteger a todos los seres humanos, incluida la comunidad LGBTI, no está «fuera» del marco legal internacional. Poner fin a la discriminación y la violencia para todos y en todos los lugares es absolutamente central para nuestros principios y nuestro trabajo», ha explicado.
Sobre Israel, el Alto Comisionado ha denunciado que el Gobierno israelí «continúa negando el acceso» a los territorios palestinos del relator especial sobre los Derechos Humanos «desde 1967» y también ha rechazado la visita de una Comisión de Investigación sobre la guerra de Gaza de 2014. «Emplazo a Israel a dar acceso a todos los mecanismos de Derechos Humanos, incluido el organismo investigador cuyo mandato se creo el mes pasado, para permitir la supervisión imparcial, la justicia y la rendición de cuentas avanzada», ha señalado.
Sobre Corea del Norte, el máximo responsable en materia de Derechos Humanos de la ONU ha dicho que su oficina ha encontrado «pocos cambios» en la situación de «sistemáticas, graves y prolongadas violaciones de Derechos Humanos». «Las personas de Corea del Norte arriesgan sus vidas y su dignidad para el ejercicio de sus derechos humanos fundamentales, incluso intentando salir del país y comunicándose con personas del exterior», ha explicado.
Zeid también se ha referido a China y ha denunciado la situación que vive la población de las regiones del Tíbet y de Xinjiang, una zona en la que viven la mayoría de los musulmanes uigures y en la que la situación de los Derechos Humanos «se está deteriorando rápidamente».
En materia de migraciones, Zeid ha reclamado a todos los países que no pierdan de vista que «las personas no pierden sus Derechos Humanos por cruzar una frontera sin un visado» y que garanticen que se respetan los derechos de los desplazados.
En este sentido, ha criticado las políticas migratorias de Hungría, por intentar «criminalizar» el trabajo de las ONG que trabajan en las fronteras y supervisan la situación en esas zonas, y las de Estados Unidos, por «castigar a los hijos por las acciones de sus padres». «Pido a Estados Unidos que cese de inmediato la práctica de la separación forzosa de estos niños y emplazo al Gobierno a que ratifique la Convención de Derechos del Niño», ha subrayado.
A modo de resumen, el Alto Comisionado para los Derechos Humanos ha denunciado que cerca de 40 países no han recibido visitas de relatores especiales de la ONU durante los últimos cinco años. De ese grupo de naciones, quince países tienen más de cinco visitas pendientes (Bahréin, Bielorrusia, Bolivia, Colombia, República Democrática del Congo, Egipto, Etiopía, Irán, Jamaica, Nicaragua, Pakistán, Turkmenistán, Uganda, Yemen y Zimbabue).
Zeid ha concluido su intervención denunciando los obstáculos al trabajo de sus investigadores y ha recibido una ovación de los asistentes, que se han puesto en pie para aplaudirle en su despedida en Ginebra.