Según las informaciones recogidas por el diario local ‘The Star’, el hombre, James Mukangi, ha dicho que mató y despellejó a más de 1.100 gatos en los últimos ocho años para vender su carne y ha detallado que ganó 500.000 chelines (cerca de 4.200 euros) con esta práctica.
«Siempre hubo una alta demanda de carne de gato que nunca llegué a satisfacer debido a la falta de gatos en mi zona. Fue duro cuando empecé el negocio, pero mi clientela ha crecido», ha explicado.
«Tenía clientes a los que vendía la carne de gato desde hace cerca de ocho años», ha dicho Mukangi, quien fue descubierto despellejando un gato el domingo en la localidad.
La Policía tuvo que intervenir para evitar que el hombre fuera agredido por residentes locales y comparecerá este lunes ante un tribunal, si bien no está claro qué cargos le pueden ser imputados.
Githui Kaba, un veterinario del país, ha recalcado que el consumo de carne de gato es inseguro e ilegal debido a que no pasa inspecciones sanitarias.