Olivier Roy es un experto politólogo en Oriente Medio que, a día de hoy, dirige el programa del Mediterráneo del Instituto Universitario Europeo de Florencia. En 1986 se unió al Centro Nacional de Investigaciones Científicas francés, donde sigue ejerciendo como investigador. Experto en el Islam y en fundamentalismos religiosos, entre otros temas, hace un repaso para Teinteresa.es de cómo se ve la situación global de los avatares que sufre Oriente Medio a día de hoy.
-¿Cuáles ve como soluciones futuras a la división que existe en el seno de Irak?
El conflicto entre la Shia (chiíes) y los suníes continuará en el tiempo, pero ninguna de las facciones quiere un país independiente el uno del otro. No quieren solo una parte de Irak y seguirán luchando por el control del Estado central, incluso si, al final, se produce una división de facto. Ninguno de los dos lados será capaz de acabar con el otro. Por otra parte los kurdos iraquíes serán casi independientes y respetarán las fronteras establecidas en Irak porque no así no se convertirán en anatagonistas de sus vecinos; no intentarán crear un Kurdistán más allá de los actuales bordes de Irak.
-¿Por qué muchos jóvenes occidentales se están enrolando en organizaciones como ISIS (Estado Islámico de Irak y el Levante)?
No es un problema de la cultura, muchos son herederos de la ultraizquierda de los 70 y quieren formar parte de la única organización que está luchando contra el orden global establecido. Otros son conversos o los «nacidos de nuevo» que quieren enfrentarse a los «herejes» que pertenecen a la Shia (los chiíes).
-¿Podría darse que las potencias occidentales se enfrentaran a los poderes de Oriente Medio en una guerra?
El problema no está en los «poderes occidentales»: muchos de los estados árabes son aliados de Occidente. La cuestión viene de si se interviene, o no, en las presentes guerras civiles (Siria, Irak…). El único país que puede hacer eso es Estados Unidos. Los europeos no quieren y no tienen los medios para intervenir. Además Obama dejó claró que se opone a las políticas de Bush sobre las intervenciones militares en Oriente Medio y nunca repetirá las acciones en Irak y Afganistán.
-¿Cómo considera la política que está llevando a cabo Obama en Oriente Medio? Teniendo en cuenta que Kerry ha estado viajando por Egipto y el resto de países árabes, para proponer la paz en la Franja de Gaza, y ahora salta la noticia de que los norteamericanos siguen suministrando armas a los rebeldes moderados.
Obama no quiere intervenir directamente. Los americanos quieren apoyar a la «buena oposición» (los rebeldes moderados sirios) para que el régimen no se haga fuerte y que los radicales islámicos no tomen el control. Este es el motivo por el que los norteamericanos están mandando armas, pero no van a ir más allá de cierto nivel de apoyo.
-¿Qué ocurre con la falta de dependencia energética de Estados Unidos y las relaciones con los países árabes?
Una de las razones, pero solo una, del cese de contacto de los americanos con Oriente Medio es que ya no necesitan el petróleo del Golfo. Pero, tampoco la intervención de Irak en 2003 fue por este motivo. Quizá, el problema del petróleo ha sido exagerado para entender la política de Estados Unidos en el Golfo.
-¿Puede darse el hecho de una extensión de una corriente islamista más moderada en los países de Oriente Medio?
No es una cuestión de ideas moderadas o radicales. En primer lugar, es un problema político: dictadura versus democracia, chiíes contra suníes, minorías contra mayorías y nacionalismo. Todos los conflictos en Oriente Medio están conectados primero con el sectarismo y el nacionalismo. El islamismo radical está manejado por elementos ajenos como Al Qaeda.
-¿Qué tipo de democracia sería posible en estos países? Es cierto que Occidente ha intentado implantar el sistema democrático en Oriente Medio, pero no ha conseguido sus objetivos.
Cada vez que Occidente ha intentado establecer una democracia en Oriente Medio ha ido peor. Pero hay una demanda de democracia autóctona. El problema es que los aliados más cercanos a Occidente son los mayores enemigos de la democracia (Arabia Saudita o el General Sissi en Egipto). Túnez ha sido el único que ha construido una democracia despacio, porque no hay influencia de fuera, tanto por parte occidental como por los países árabes.
-¿Cómo podemos considerar la actitud de Iran y Arabia Saudí en las tensiones que afectan a estos países (Siria, Irak)?
Arabia Saudí está luchando en dos frentes: contra la shia de Iran, defendiendo a los suníes, pero también contra los demócratas y los Hermanos Musulmanes. Así que está minando su propio terreno.
-¿Cómo podemos denominar a la Primavera Árabe en función de las consecuencias que han devenido?
La Primavera Árabe ha supuesto la expresión de cambios en profundidad en las sociedades árabes (generaciones nuevas, nueva cultura política, cambios en la democracia, extensión de la educación, inserción de las mujeres en la universidad y el mundo laboral) Así que, a pesar de las revoluciones y las guerras civiles el largo plazo se muestra favorable a la democratización.