La Comisión con Potestad Legislativa Plena III de la Asamblea Legislativa de Costa Rica ha aprobado el proyecto de ley 17944, que declara la paz como «un derecho humano fundamental» y ordena que, en adelante, el país está obligado aplicar la «neutralidad perpetua, activa y no armada en los conflictos entre Estados y dentro de estos».
Sin fuerzas armadas desde hace 65 años, el país centroamericano ratifica de esta manera su decisión de no tomar partido en conflictos bélicos, salvo cuando así lo obliguen los tratados internacionales suscritos en el marco de Naciones Unidas.
El texto subraya que la fuerza de Costa Rica reside en su apego al derecho, al orden y a la paz, «depositando nuestro país su confianza en el sistema de seguridad colectiva internacional» y en la solidaridad interamericana y del resto del mundo.
Para este país de de 4,5 millones de habitantes, supone un paso lógico después de suprimir la pena de muerte en el siglo XIX, abolir el ejército a mediados del siglo XX, y optar por la neutralidad perpetua en 1983.
Esta actitud de pacifismo a ultranza fue reconocida en 1987, cuando se concedió el Nobel para Óscar Arias, por su papel protagonista en el proceso de paz de Centroamérica, tal y como aseguró el diputado Rolando González.
LEY DE PROCLAMACIÓN DE LA PAZ COMO DERECHO HUMANO Y DE COSTA RICA COMO PAÍS NEUTRAL
ARTÍCULO 1.-
Costa Rica es una República democrática, libre, independiente, pacífica, neutral y no armada.
ARTÍCULO 2.-
La paz es un derecho humano fundamental. El Estado promoverá, defenderá y garantizará la paz por todos los medios posibles y mediante la aplicación de su neutralidad perpetua, activa y no armada en los conflictos entre Estados e internamente en los países, según lo que dispongan los tratados internacionales, sus principios y propósitos y la ley.
Costa Rica es neutral ante todos los conflictos armados internacionales y ante todos los conflictos armados dentro de otros estados, de conformidad con lo que disponen esta Ley y el Derecho internacional.
El Estado incluirá en sus programas de educación, principalmente preescolar, primaria y secundaria, contenidos curriculares que propugnen y cimenten la cultura de paz, para lo cual se apoyará en el Instituto Costarricense de la Neutralidad, la Paz y la Democracia, así como en la Universidad para la Paz, entidad afiliada a la Organización de las Naciones Unidas, con sede principal en nuestro país, para que con esas instituciones se alienten los estudios de paz en los centros educativos y se contribuya con todo ello al establecimiento de una cultura de paz en la sociedad costarricense.
La neutralidad de la República frente a los conflictos que afecten a otros Estados, será perpetua, activa y no armada.