Corea del Norte es un estado fallido. Su colapso puede “llegar en los próximos meses o años”, según el especialista Bruce W Bennet en un documento llamado “Preparando los escenarios para el colapso de Corea del Norte”. ¿Por qué puede llegar el fin del régimen norcoreano? El informe apunta a seis causas. Una economía centralizada desastrosa; un sector industrial dilapidado; una base agraria insuficiente; una población y un sector militar desnutridos; el desarrollo de su programa nuclear y la posibilidad de que colapse el régimen de Kim Jong Un.
En las 342 páginas de este informe se explica que existen pocas dudas sobre las consecuencias dramáticas que tendrá el colapso de Corea del Norte sobre la comunidad internacional que en opinión del autor del informe “sus efectos serán comparables con las caída de la Alemania del Este.”
Los expertos prevén 3 escenarios
Una guerra civil. Los expertos dudan que la caída del régimen se produzca de manera pacífica. En su opinión, quienes han estado siempre al lado de la dinastía Kim, disfrutando se sus privilegios, bebiendo botellas caras de whiskey y viajando por Europa no abandonará tan fácilmente ese estatus y menos aún permitirán que se les juzgue por crímenes contra la humanidad en Tribunal de la Haya.
Sin nada que perder, las élites norcoreanas tomarán las armas, situación que conducirá hacia una guerra civil. O, según explica Michael O’Hanlon, investigador del Brookings Institute en Washington, las élites norcoreanas podrían conducir el país hacia un golpe militar en el que las fuerzas armadas se dividan entre quienes apoyan y no la insurgencia.
¿Qué pasará con el programa nuclear? Venderlo a los países de Oriente Medio
En colapso de Corea del Norte también influye el devenir de los expertos en armas nucleares que en la actualidad posee el país. Según las investigaciones estadounidenses, Corea del Norte tiene capacidad nuclear. Desde 2006 ha llevado a cabo varios ensayos nucleares, en 2006, 2009 y 2013.
Si estalla la anarquía, el escenario sería terrible. Los científicos y empleados norcoreanos mal pagados y descontentos verían cómo el conocimiento y la experiencia que poseen son susceptibles de venderse al mejor postor. Los expertos advierten, no será difícil encontrar nuevos clientes. Irán y Siria estarían entre países que probablemente pujarían por contratar a estos especialistas.
Una crisis humanitaria
En 1990, un millón de norcoreanos murieron de hambre. Aunque las condiciones han mejorado respecto a esa época, en las zonas rurales, la población sufre un elevado grado de malnutrición y se enfrentan a carencias relacionadas con el sistema de salud. En la actualidad el sistema de distribución del Estado se encarga de distribuir pequeñas cantidades de arroz entre la población que, a menudo, tiene que recurrir al mercado negro para satisfacer sus necesidades básicas. Según los expertos el colapso del régimen conduciría al colapso de sistema de distribución del Estado y como consecuencia a la escasez de alimentos.
Los expertos advierten: las consecuencias del colapso serán aterradoras y subrayan que la comunidad internacional necesita contar un plan de actuación ante el fin de la dinastía Kim.