Los primeros bombardeos de EEUU en coalición con sus aliados árabes han tenido como objetivo varias posiciones de los yihadistas en el norte de Siria. En esta ofensiva, EEUU no ha estado solo. Bahréin, Jordania, Arabia Saudí, Qatar y Emiratos Árabes Unidos apoyaron los más de 50 bommbardeos efectuado por la coalición para neutalizar a los radicales.
Los Emiratos árabes unidos y Arabia Saudita están en primera línea del frente anti-EI entre las monarquías del Golfo.
Washington podría recibir ayuda de Bahréin, sede de la Va. flota estadounidense, de Kuwait, que también otorga facilidades militares a Estados Unidos y Catar, que pone a disposición de los estadounidenses la base aérea de Udeid y acoge al Centcom, comando militar encargado de Medio Oriente y Asia Central.
Los miembros de la Liga Árabe también se comprometieron a luchar contra el terrorismo y el EI a nivel «político, de seguridad e ideológico», pero individualmente, pocos de ellos especificaron el nivel de su implicación en la campaña contra el EI.