Australia es uno de los países occidentales con mayor participación en la alianza que lucha contra el avance del Estado Islámico en Siria e Irak. En el mes de septiembre, el l primer ministro anunció que el despliegue de 600 soldados, 400 de ellos de la Aviación al país árabe. Además, ha enviado 8 aviones de combate a la región para frenar a los terroristas.
Además, Australia ya ha ayudado a Estados Unidos a entregar armas a las fuerzas kurdas que luchan contra los yihadistas del EI en el norte de Irak. También participó en la entrega de ayuda humanitaria por aire a ciudades iraquíes asediadas por los extremistas.
Al menos, 70 australianos luchan en la filas del Estado Islámico
El Gobierno de Camberra calcula que hay unos 70 australianos en las filas del EI, mientras que otros 100 trabajan activamente en Australia como apoyo logístico y de reclutamiento.
En el mes de octubre, el Senado de Australia aprobó un conjunto de leyes para prevenir que sus ciudadanos viajen al extranjero para combatir en conflictos bélicos que no cuentan con el respaldo del Ejecutivo. Se trata de la «Ley contra los Combatientes extranjeros», que forma parte de una serie de medidas contra el terrorismo. Estas leyes facilitan al Gobierno de Camberra la cancelación de pasaportes y permite a las autoridades a prohibir el desplazamiento a ciertas zonas de conflicto.