«Tras el arresto de dos presuntos espías, he ordenado la expulsión de cuatro miembros de la Embajada siria en Berlín», ha dicho el ministro en un comunicado.
Los fiscales alemanes creen que los dos hombres, que fueron detenidos el pasado martes, han estado realizando labores de espionaje para los servicios de inteligencia del presidente sirio, Bashar al Assad, durante años.
El embajador de Siria en Berlín fue convocado el martes por el Ministerio de Exteriores germano. «El Gobierno alemán ha vuelto a transmitir claramente su opinión de que este comportamiento contra miembros de la oposición siria no es aceptable en Alemania», señala el comunicado.
El pasado diciembre, Ferhad Ahma, un político del Partido Verde alemán y miembro del Consejo Nacional Sirio (una alianza opositora), sufrió una paliza en su casa de Berlín. Había participado en actividades contra el Gobierno de Al Assad y varios diputados de su partido relacionaron la agresión con los servicios secretos sirios.
Según la ONU, más de 5.000 personas han muerto de forma violenta en Siria desde que, hace once meses, comenzaron las protestas antigubernamentales, que han sido reprimidas con dureza por el Ejército y la Policía. El Gobierno afirma estar luchando contra «terroristas» que han matado a más de 2.000 agentes y soldados.