Mirziyoyev anunció el jueves en un comunicado el cese de Murodov, que llevaba en el cargo desde el pasado 31 de enero. Su antecesor, Ihtiyor Abdulayev, también está siendo investigado por corrupción.
El Gobierno el informó entonces sobre los motivos, pero este viernes el presidente ha explicado desde el Parlamento que el ya ex fiscal general habría recibido sobornos de entre 100.000 y 50.000 dólares.
Mirziyoyev ha instado al nuevo jefe del Ministerio Público, Nigmatilla Yuldashev, a «limpiar la sangre del sistema». «Esto es una enfermedad que debemos erradicar», ha dicho sobre la corrupción, según el portal de noticias Gazeta.
Tanto Murodov como Abdulayev fueron promocionados tras una purga similar entre los altos cargos. Mirziyoyev, que llegó al cargo en 2016 tras casi tres décadas de Gobierno de Islam Karimov, busca abrir Uzbekistán al mundo.