El número 37.254 ya es más famoso que el Bar de Antonio. Este es el número que vendía el bar real de anuncio que este año. A las pocas horas de emitirse el anuncio en televisión, Hernán el dueño de verdad, se había quedado sin ningún decimo en el bar. Rápidamente la noticia corrió como la pólvora por el barrio y todo quería hacerse con uno de ellos.
Doña Manolita era una de las administraciones de España que tenía este preciado número, su responsable Concha Corona, nos cuenta que los teléfonos no han dejado de sonar pidiendo este número. “Ha sido la combinación de este año, ni la fecha de la muerte de la duquesa ni la de la coronación de Felipe VI. Todo el mundo nos ha pedido el décimo del bar de la Lotería de Navidad. Nos han llamado de todos los puntos de España preguntando por él”, explica Concha.
La responsable de la administración más famosa de España señala que este año la ventas van mejor que el año pasado. “Aun no podemos hablar de cifras porque hasta que no se cierre la venta no sabremos, pero la sensación es de que el año va a ser mejor que el 2013 y eso que aún quedan los últimos días que es cuando más se vende. Este año se están compartiendo menos números, la gente está comprando décimos de manera individual”, señala Concha.
Esta administración es tan famosa en España que más de uno piensa que tiene todos los números y que puede conseguirlos. “Nos ha pasado más de una vez que una persona nos llama pidiéndonos un décimo a pesar de que sabe que lo venden en otro punto de España. Incluso nos piden que se lo consigamos cuando nosotros no lo podemos hacer”, relata entre risas.
Doña Manolita tiene algo que a todo el mundo atrae y que consigue que la gente haga colas de una o dos horas para comprar sus décimos. Dos chicas se colocan en ese momento al final de la cola, saben que les queda por delante una hora como minino de espera. No les importa, solo quieren comprar sus décimos de este año en Doña Manolita.
Un grupo de 15 mujeres está de visita en Madrid y no quieren irse de la capital sin su décimo de la suerte. Se han puesto todas de acuerdo para comprar el mismo. Una de ellas afirma que se va a llevar 10 para repartir un décimo con cada uno de sus hijos.