En declaraciones a los medios este viernes, ha sostenido que esta suspensión se debería haber hecho antes, aunque ha destacado que ha tenido el apoyo de los partidos constitucionalistas y no de Unidas Podemos: «El populismo, Podemos, los amigos de Colau, no han participado en este voto. Tienen otra idea, son soberanistas».
Considera que esto demuestra que en Barcelona no se puede pactar con la alcaldesa, Ada Colau, y ha insistido en el riesgo de que el PSC lo haga: «Aquí no puede haber acuerdo con el populismo y el soberanismo».