La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, propuso este lunes que “el pavimento de la Gran Vía sea continuo” y sin “bordillos” como idea para mejorar el estado de esta arteria madrileña, así como reducir los autobuses que la atraviesan para crear una “lanzadera” que la recorra. La semana pasada confirmó su peatonalización parcial antes de finalizar el mandato.
Así lo explicó en una entrevista concedida a TVE en la que expuso una serie de “medidas para darle esa agilidad” a la Gran Vía, que en los últimos días se ha convertido en objeto de debate después de estar cortada durante cerca de un mes y de que la primera edil confirmara su intención de peatonalizarla.
Carmena quiere “que deje de ser una vía de cruzar Madrid” porque “no tiene sentido”, por lo que propone reducir la gran parte de su tráfico. Hasta ahora se conocía que el propósito del Ayuntamiento era ensanchar las aceras, de manera similar al ‘simulacro’ que se ha experimentado estos días con el corte con motivo de la Navidad.
Sin embargo, hoy señaló que una de las propuestas que baraja el Consistorio es eliminar las aceras, de manera que el pavimento sea continuo. Asimismo, explicó su intención de eliminar las líneas de autobús que la atraviesan y crear una que sirva de “lanzadera” para unir Cibeles con la Plaza de España.
Estos dos emplazamientos servirían, a su vez, para hacer transbordo ligando con otras líneas que prestan ya servicio en las paradas que se encuentran en estas plazas.
Los ciudadanos opinarán
Carmena, ha asegurado que «hay muchas alternativas» para transformar la Gran Vía de manera que se reduzca el tráfico privado y que quiere abrir un proceso de «participación ciudadana» para decidir cómo se acomete el cambio.
«Queremos que haya participación ciudadana, queremos hacer consultas. Lo mismo que se han hecho consultas sobre la plaza de España queremos hacer consultas sobre cómo llevar a cabo ese proceso de transformación, de la reducción del tráfico en la Gran Vía», ha dicho la alcaldesa en »Los Desayunos de TVE» cuando le han preguntado si antes de que finalice la legislatura estará cerrada esa arteria.
Con la medida de cerrar la Gran Vía durante las fiestas de Navidad, el Ayuntamiento quería «testar con la ciudadanía el nuevo concepto de Gran Vía que se está planificando» y según ha dicho hoy la alcaldesa se han recopilado muchos datos para elaborar un informe completo sobre una medida que ha tenido una buena aceptación.