En rueda de prensa, Janés ha resaltado que la publicación de esta antología supone «un momento importantísimo» para su escritura, que consigue dar una sensación de «totalidad» en toda su obra, tal y como ha descrito su antologador Jaime Siles.
«Es un canto de supervivencia, porque cuando el poeta escribe está insertándose en la vida. Al mismo tiempo es un intento de entender la realidad, la existencia en el mundo y la existencia del propio mundo. La frase importante ya la dijo Shakespeare: »Ser o no ser, de eso se trata»», ha matizado Janés.
Siles ha explicado que en la selección de poemas ha atendido a diversos episodios que cree influyentes en la obra de la autora, como es esa escena de «la niña que escucha en Pedralbes a un coro de »clarisas»» o el accidente mortal de tráfico de su padre.
A todo ese interés por la relación entre la persona y el espacio y el tiempo, acompañado de una apertura de su poesía a la ciencia, Siles ha añadido también «un terreno místico» que se relaciona con lo erótico. «Se incluyen poemas en que el erotismo es especial, y yo me he atrevido a llamarlo religioso porque es como el de San Juan de la Cruz o el de Santa Teresa», ha apuntado.
Siles ha destacado algunos poemarios de Janés como »Secretos del bosque» o »Huellas en la corteza» que considera esenciales para esta recopilación, si bien la propia poetisa ha destacado la «especial ilusión» que le produce el que se hayan incluido partes de su último trabajo, »Epsilon o el jardín de las delicias».
«Es una muestra del conocimiento científico como tentación del Paraíso. Cuando me puse a escribirlo, fue por un rapto de inspiración, lo acabé en cuatro días y cuando lo terminé me quedó esa sensación enorme con la que sentí un deseo de morir. Fue como una espeluznante acción a distancia a través de la inspiración», ha señalado.
¿MERECE LA PENA VIVIR?
Janés ha ido detallando los pasos que ha ido registrando su poesía con el paso de los años, marcada por el «tema sartreano de si la vida merece la pena ser vivida». «Cuando resolví que sí, di un salto en mi poesía para pasar de fijarme en el próximo a fijarme en el objeto vivo. Luego vendría otro paso más, que sería el de la relación del hombre con el cosmos».
Entre sus influencias ha citado a San Juan de la Cruz, Góngora, Quevedo o Jorge Guillén, aunque tampoco ha olvidado al poeta checo Vladimir Holland, de quien ha traducido numerosas obras, o el poeta portugués Antonio Ramos Rosa.
Para Janés, la función de la poesía también es la de «buscar rupturas», algo que los físicos podrían denominar «el caos armónico». «¿Cuál es la realidad? ¿Lo de fuera o lo de dentro? Para mí, es tan real el pensamiento como la materia, lo visible y lo invisible», ha aseverado.
DISCURSO PARA LA RAE
La escritora catalana fue elegida el pasado mes de mayo nueva académica de la Lengua para ocupar el sillón U. Janés ha reconocido que ya tiene pensado la línea por la que transcurrirá su discurso de ingreso, que abordará «la influencia de la traducción en las creaciones».
No obstante, también ha matizado que, por el momento, ha empezado a «trabajar el elogio» de la figura de su antecesor en el sillón, Eduardo García Entrerría, un catedrático de Derecho Administrativo «de gran bondad e integridad, defensor de los Derechos Humanos y al que le interesaba la literatura», ha concluido.