«El mandamiento fundamental de la Oficina de Agua es proporcionar agua limpia, fresca y constante a sus clientes», declaró en un comunicado David Shaff, el director de la Oficina del Agua de Portland, quien añadió que «la premisa es que no orinamos en ella».
En junio de 2011 la ciudad tuvo que drenar 28,3 millones de litros de agua de la reserva en Mount Tabor, al sudeste de Portland, por culpa de un individuo llamado Joshua Seater.
Esta vez hay que desechar casi 148 millones de litros de agua de una reserva diferente en el mismo sitio después de que una cámara de vigilancia captó la imagen del joven transgresor en acción.
Reservoir5 offline after man urinates in water. Health risk slight but we won»t purposely serve tainted H2O to public http://t.co/HC4LKlHqyv
— Portland WaterBureau (@portlandwater) abril 16, 2014
Agua procesada para consumo humano
Los estanques en superficie contienen el agua que ya ha sido tratada y está lista para la distribución a los clientes. Shaff indicó que la orina representa un riesgo muy menor para la salud y hay animales que la contaminan continuamente sin que ello represente un problema de salud pública.
Pero, añadió Shaff, la agencia no quiere distribuir agua que fue contaminada deliberadamente. «Desde mi perspectiva hay una diferencia, al menos de percepción», continuó el funcionario, al señalar que los clientes «no esperan beber agua que algún intrépido contaminó decidiendo que quería orinar en un depósito».
Las cámaras que vigilan la reserva captaron el miércoles en la madrugada las imágenes de tres hombres cerca del estanque número 5 de Mount Tabor. Uno de los individuos orinó sobre el agua a través de la cerca de hierro, y poco después los otros dos trataron de escalar la barrera.