El diputado del PP Francisco Mercadal ha señalado que esta ley «supone el cumplimiento de un compromiso electoral del PP» y cuenta con el «máximo consenso del sector», incluyendo a sindicatos, Consells Insulars y ayuntamientos.
La ley regula las zonas de gran afluencia turística o las licencias autonómicas para grandes superficies. Según ha dicho Mercadal, el PP ha aceptado «varias enmiendas» de la oposición por lo que se han producido algunas transacciones.
La Ley regula la actividad comercial y recoge materias de simplificación administrativa, así como la creación de una comisión interinsular como órgano de participación en las cuestiones de materia de comercio que se tengan que regular.
También regula temas de horarios, libertad de precios, aperturas en domingo, acciones promocionales y ventas especiales como la venta a distancia, ambulante o a domicilio, así como la actividad inspectora y las sanciones. Asimismo, se adapta a nuevas normativas europeas e impulsa un sector primordial de la economia de Baleares.
El sector del comercio, ha dicho, tiene una «repercusión social muy importante» puesto que supone el 10 por ciento del PIB de Baleares, una comunidad en la que hay más de 21.000 comercios y da empleo a más de 70.000 personas.