El presidente rumano, Klaus Iohannis, y el primer ministro, Mihai Tudose, han destacado el papel en la historia de Europa de Miguel I de Rumanía, que falleció hoy a los 96 años de edad tras una larga enfermedad.
«Fue una de las personalidades más importantes de Rumanía y escribió con grandes letras la historia de Rumanía», declaró Iohannis tras conocer el fallecimiento del exmonarca.
«Rumanía organizará todas las ceremonias procedentes y de declararán días de luto nacional», añadió el jefe de Estado.
Por su parte, el jefe del Ejecutivo afirmó que «el pueblo rumano se despide con dolor del rey Miguel, un modelo de moralidad y dignidad para los rumanos, una personalidad que ha marcado fuertemente la historia de Rumanía».
«Le vamos a echar de menos, sobre todo el próximo año, cuando celebraremos el Centenario de la Gran Unión de 1918 (la constitución del actual Estado de Rumanía), un momento con un significado especial para nuestra nación», escribió Tudose en la red social Facebook.
«El recuerdo de Su Majestad siempre quedará vivo», concluyó el primer ministro.
Miguel I de Rumanía, hijo del rey Carlos II y de Elena de Grecia, reinó en Rumanía entre 1927 y 1930 bajo regencia y, luego, entre 1940 y 1947.