A primera hora de la mañana llegaba el hijo de Isabel Pantoja a los Tribunales y allí permaneció cuatro horas. Kiko y Jessica mantuvieron sendas entrevistas con miembros del Equipo Psicosocial Judicial que ahora deberá pronunciarse si considera que lo más idóneo para los intereses del menor es que se mantenga el modelo actual de custodia compartida, o bien se modifique.
La presencia de ambos en la sede judicial de la capital guipuzcoana se debe a que la tramitación se lleva a cabo en los juzgados de Eíbar. Jessica Bueno, residía entonces en la ciudad armera junto a Jota Peleteiro, integrante en aquella época de la plantilla de la Sociedad Deportiva Eibar.
TRAS EL ENCUENTRO JUDICIAL, KIKO E IRENE SE MARCHARON CON EL PEQUEÑO FRANCISCO A CASA
El primero en abandonar los juzgados era Kiko Rivera, que muy elegante con pantalón azul, camisa de cuadros y deportivas, salió acompañado de su pareja Irene. La joven, embarazada, llevaba al niño en brazos, y es que han formado una auténtica familia.
Kiko, serio y sin ganas de hacer declaraciones, no quiso decirnos si a partir de ahora podrá estar más tiempo con su hijo. Tanto él como Irene caminaron rápidamente hacia el vehículo en el que regresarían juntos a casa. Con ellos iba también el pequeño Francisco, que Irene se encargó de colocar cuidadosamente en el coche. El niño, que iba jugando con el teléfono móvil, iba en brazos de Irene.