La Familia Real belga vuelve a sonreír y a su rutina tras el fallecimiento de Fabiola de Bélgica. Como viene siendo habitual todos los años por estas fechas, Felipe, Matilde y sus cuatro hijos han posado para los medios de comunicación en el Palacio Real de Bruselas para felicutar las fiestas.
Matilde estaba elegantísima con un vestido negro y recto de cuello halter y un recogido que dejaba al descubierto su esbelto cuello. La nota de color en el vestuario la pusieron las niñas; mientras Isabel se decantó por un vestido estampado en fucsia y negro, su hermana pequeña, Leonor, lució uno liso con un simpático lazo en la cintura.
La sobriedad la pusieron Felipe, que optó por un traje oscuro, y sus hijos, Gabriel y Emmanuel, que lucieron también corbata oscura y camisa blanca, como su padre.
Después del posado, todos disfrutaron de un concierto de Navidad que, como cada año, tuvo lugar en el palacio, al que tampoco faltaron la princesa Claire y Astrid.