A su salida del Palacio de Dueñas, los diseñadores andaluces dieron todas estas pisas, aparte de afirmar que la Duquesa se encuentra "relajada y tranquila". Y eso que ya falta muy poquito para la inminente boda.
Ese es justo el motivo por el que la aristócrata no para de recibir visitas. Su domicilio sevillano acoge a todos con gusto en estos días de felicidad en los que todo está preparado para celebrar el gran día del enlace entre Cayetana y Alfonso Díez.
Sin embargo, la Duquesa sí que ha querido aclarar que el rumor de que ella y su novio, el funcionario, van a adoptar un niño "es una tontería". La futura novia parece molesta por la presión mediática a la que se está viendo sometida últimamente.
Tras pasar unos días en Sevilla, Cayetana ha regresado a Madrid. Este martes por la noche llegaba a la capital de mal humor y muy cansada. De hecho, cuando salía del AVE declaraba tajante que no iba a desvelar ningún detalle de nada e insistía, muy enfadada, en que le quitaran la luz de la cámara porque le molestaba.
Por su parte, Carmen Tello, como buena madrina, también está ultimando los detalles y, por eso, acudió al taller de Victorio & Lucchino para probarse su vestido, del que comentó que es "elegante y preciosísimo".
Finalmente, el protagonista de la historia continua sin acostumbrarse a la persecución mediática que está sufriendo y sigue sin querer hacer ninguna declaración sobre su enlace con Doña Cayetana.