Lo ha anunciado, al término del Consello de la Xunta, el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, quien ha incidido que varias de estas medidas se han sumado tras el diálogo con las entidades de iniciativa social, mientras que otras, como la activación de un mecanismo para anticipar el pago de ayudas a familias con menores en riesgo de exclusión ya habían sido avanzadas en la presentación del borrador del plan.
Entre las nuevas medidas, Feijóo ha citado el «apoyo» a la mejora de las capacidades y competencias básicas de la población adulta, incluidos emigrantes; así como la potenciación de la educación dual adaptada «a las necesidades de contratación» de los sectores productivos gallegos. También ha anticipado el refuerzo del respaldo a familias monoparentales.
Además, se habilitarán viviendas de titularidad de la Xunta como viviendas de carácter asistencial «con recursos de alojamiento transitorio» que, según ha explicado, permitirán el desarrollo «de programas de acompañamiento integral» para personas sin hogar. Del mismo modo, ha concretado que se facilitarán «ayudas extraordinarias» a emigrantes retornados en situación de especial vulnerabilidad.
De los 522 millones de presupuesto mínimo, «ampliable» si se dan las condiciones parar ello, Feijóo ha concretado que las partidas que suponen el mayor peso, con un total de 400 millones, son las relativas a la renta de integración social y a la contratación de personas en riesgo de exclusión. Dichos programas de contratación se dotarán con casi 70 millones.
«Vamos a seguir destinando dinero a la Risga, aunque entendemos que las demandas de personas con necesidades están disminuyendo y esperemos que lo hagan más en los próximos años», ha aseverado el presidente gallego.