Con una inversión de más de 4 millones de euros, el proyecto se centrará en el desarrollo de nuevas interfaces entre el conductor y su vehículo, apoyándose en pruebas de realidad virtual y la integración de la realidad aumentada, condición indispensable para la introducción en el mercado de vehículos autónomos y conectados.
Feijóo ha explicado que el CTAG aportará especialistas en esta materia, laboratorios, el simulador del que dispone y la pista de pruebas.
A estos medios se sumará la experiencia profesional de ingenieros de la fábrica viguesa de PSA Peugeot Citroën, mientras que la Xunta aportará los recursos tecnológicos de la Axencia Galega de Innovación.
Feijóo ha resaltado la importancia de esta iniciativa, que permitirá a la comunidad dotarse de un polo tecnológico «de referencia» en un sector estratégico como el de la automoción, que suma más de 100 empresas y aporta el 14 por ciento del PIB de la comunidad, además de seguir «poniendo en valor» los centros tecnológicos gallegos.
También ha resaltado que con este proyecto se da continuidad a la apuesta de la Xunta por la innovación en un doble sentido: innovación en el sector de la automoción –en el que el Gobierno gallego invirtió 600 millones desde 2009–; e innovación de la economía.