Este será uno de los asuntos «prioritarios» a tratar en la reunión que esperan mantener en las próximas semanas con la nueva ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, durante la que pedirán una Ley del Tercer Sector en la que también se aborde una definición del propio sector, un reconocimiento expreso de su labor y de su capacidad de interlocución en los asuntos sociales, según ha adelantado Poyato en una entrevista a Europa Press.
En este sentido, el presidente de la Plataforma ha afirmado que sería «un logro» que cada vez que la administración general del Estado tuviera que legislar en el ámbito de lo social, «se tenga en cuenta a esta nueva entidad», como representante del sector, «no sólo como un agente consultivo». «Creemos que muchas veces no tenemos suficiente reconocimiento», ha apostillado.
Por ello, Poyato señala que es importante «tener una voz única» a la hora de negociar con el Gobierno, ya que, de esta forma, «se podrá hacer más presión». Así se entiende «la necesidad de trabajar en proyectos comunes» que une ahora en este proyecto común a la Plataforma de ONG de Acción Social, la Plataforma del Voluntariado de España (PVE), la Red Europea de Lucha Contra la Pobreza y la Exclusión Social del Estado Español (EAPN), el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi), Cruz Roja Española, Cáritas Española, y la Organización Nacional de Ciegos Españoles (ONCE).
«Es necesaria una voz única a la hora de defender derechos sociales de las personas más vulnerables, de dar voz a quien no la tiene y de visibilizar toda la acción social que se está haciendo en el país por parte de las asociaciones que componemos esta nueva plataforma», sentencia Poyato.
ALTERNATIVA A LA GENERACIÓN DE EMPLEO
En el marco sociopolítico y socioeconómico, la Plataforma del Tercer Sector se postula como «una alternativa de generación de empleo», con 10 millones de personas atendidas y más de 2,5 millones de personas con trabajo remunerado en este campo. Además, el sector cuenta con cerca de 200.000 entidades no lucrativas y más de un millón de voluntarios.
En este punto, defiende la vocación de la Plataforma por englobar a todas las organizaciones no gubernamentales y asegura que el siguiente paso que se debe dar pasa por «establecer un mecanismo fluido que permita coordinar la acción social que desarrollamos en España junto con la acción social que se desarrolla fuera». De esta forma, reconoce que «a la hora de buscar sinergias» la Confederación de ONG para el Desarrollo se sitúa en la lista de prioridades.
Por otro lado, Poyato ha declarado que una de las «dificultades» que surgen en torno a la articulación del sector es que «en cada comunidad autónoma hay una realidad diferente». Por ello, la Plataforma se ha propuesto «estimular» que en cada territorio haya una articulación con una voz única y objetivos comunes. «El paso que ya se ha dado a nivel estatal va a ser un modelo a seguir», ha concluido.