La frío llegó en febrero para quedarse. Primero fue la masa de aire siberiano acompañada de fuertes vientos que trajo mínimas de hasta -15 grados en la península. Esta madrugada ha entrado un frente algo más húmedo que ha dejado a 34 capitales españoles con mínima de bajo cero. Y este fin de semana volverá a notarse el descenso térmico. Eduardo Román, experto de la consultora meteorológica Sirimiri Consulting, pronostica que en la noche del viernes bajarán las temperaturas, y se notará el sabado y la mañana del domingo. Pero el frío no se marchará. Román avisa que se vivirá un San Valentín gélido.
Este fin de semana volverán a registrarse temperaturas hasta -10 grados en puntos de los Pirineos, mientras que en interior de la Península los termómetros apuntarán entre los -3 y los -5 grados de mínimas. En la costa, el frío dará un tregua y el mercurio se situará entre los 4 y 10 grados.
Eduardo Román asegura que este invierno se recordará por un inicio suave y un febrero gélido. Y habrá que esperar a marzo, advierte. Lo que es seguro es que a partir del 14 de febrero llegará otro frente frío. «Hemos pasado de preguntarnos dónde estaba el invierno, a un cambio brusco de las temperaturas».
La Agencia Estatal de Meteorología, Aemet, sostiene que las olas de frío que se están sucediendo son relativamente típicas en el mes de febrero. Estos frentes se producen como consecuencia de los anticiclones, que dejan «pasillos libres» para que entren la masa de aire gélida del norte del continente, según explica Ángel Rivera, portavoz de la Aemet. Meteorología confirma este nuevo episodio de aire frío en el fin de semana, y avisa de que puede haber «un tercer envite» la semana que viene.
Nieva en Argelia e Ibiza por el »fenómeno lago»
Que se registren nevadas en el norte de África y en el archipiélago balear sorprende porque son zonas de clima suave. Pero para los expertos no es tan extraordinario. Eduardo Roman, de Sirimiri Consulting, asegura que este hecho meteorológico se conoce como »fenómeno lago», y se produce cuando una masa de aire muy frío entra en contacto con el mar, que está más caliente, adquiere humedad, y acabar descargando lluvia y nieve.
Este fenómeno es relativamente frecuente en puntos de Estados Unidos, como Chicago, Detroit o Búfalo, y ocurre después de que el frente de aire procedente de Canadá cruza los lagos del país.
La paradoja invernal
¿El descenso brusco de las temperaturas, tiene algo que ver con el calentamiento global? Eduardo Román no niega y asegura que en invierno se produce una situación «paradójica», porque los termómetros se mantienen o bajan incluso, pero nunca ha hecho más calor, a diferencia de lo que pasa el resto de las estaciones del año. «Se habla mucho de cambio climático, pero en invierno no se ha detectado los efectos del calentamiento global, porque las temperaturas no caen. En cambio, vemos que los veranos tienen a ser ascendentes». La causa de este hecho, dice Román, es un misterio todavía.