El pasado mes de febrero, el futbolista del Barça Gerard Piqué fue cazado por los fotógrafos llevando en brazos a su hijo, el lugar de utilizar la silla adecuada. De esta manera el defensa del Barça incumplió una de las normas de tráfico en la que obliga a los niños que no superen los 135 centímetros de estatura usar sistemas de retención infantiles. Se trata de una infracción grave que lleva aparejada una multa de 200 euros y la retirada de tres puntos del carné.
Messi también fue pillado hace unas semanas con un comportamiento muy parecido. El jugador del Barça fue sorprendido por las cámaras de televisión entrando en un vehículo con su hijo en brazos y sin ponerle el correspondiente sistema de retención infantil, según denunció la Asociación Estatal de Víctimas de Accidentes de Tráfico (DIA).
«Una vez más, un jugador de fútbol de renombre es pillado infringiendo una norma fundamental de tráfico. Es algo que no nos cansaremos de denunciar, ya que está poniendo en riesgo su vida y la de su propio hijo«, indicó Francisco Canes, presidente de DIA.