No solo el clima, la meteorología y la mano del hombre son las causas de los gandes incendios. Mucha culpa tienen también el abandono de las actividades en los montes así como el cese de la acción humana como la desparición progresiva del pastoreo.
El cese de las actividades tradicionales del monte, en especial de las repoblaciones llevadas a cabo en los años cincuenta, sesenta y setenta ha supuesto importantes cambios en el paisaje debidos al incremento de la densidad de árboles de poco diámetro repartidos y distribuidos en masas estancadas con una gran cantidad de biomasa.
Entonces se repoblaron millones de hectáreas con especies de crecimiento rápido, fundamentalmente especies autóctonas de pino, como Pinus pinaster o Pinus halepensis; aunque también se introdujeron Pinus radiata y eucalipto sobre miles de hectáreas. Aquellas repoblaciones jugaron un papel decisivo y sin duda satisficieron las necesidades existentes a principios del siglo xx al contribuir a evitar graves fenómenos erosivos y a reducir los riesgos de inundación, además de proporcionar, en gran medida, el principal sustento de extensas regiones españolas a través de la explotación de la madera, la resina o el piñón.
La pérdida de rentabilidad de estas actividades llevó a su progresivo abandono a partir de los años ochenta, que se ha materializado hoy con millones de hectáreas intensamente alteradas, dejadas a su suerte, en las que impera una ausencia absoluta de planificación y gestión forestal.
Se abandonan las actividades agrarias
El abandono de cultivos y el cese del pastoreo también han contribuido al aumento de superficie temporal. Según el Anuario de Estadísticas del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, desde 1992 hasta la fecha se han abandonado más de dos millones de y medio de hectáreas, de las que aproximadamente 600.000 han pasado a ser consideradas de uso forestal.
Y ello, debido, entre otros, al Plan de Reforestación de Tierras Agrarias. Otras 800.000 se han convertido en prados y pastizales. Y el resto no han sido catalogadas con ningún uso específico.