El primer bebé en Europa con microcefalia asociado al virus de Zika ha nacido en Barcelona. La madre, afectada por fiebre vírica de Zika, contrajo el virus al ser picada por un mosquito en un viaje que hizo a Latinoamérica, según han informado los médicos del Hospital Vall d’Hebrón de Barcelona.
Los facultativos le aconsejaron a la madre abortar en el pasado mes de mayo cundo le detectaran las malformaciones en el feto cuando estaba de 20 semanas de gestación. Prefirió seguir adelante.
El niño, que ha nacido por cesárea al término del embarazo, «está estable y no ha precisado ninguna reanimación específica«, ha indicado el jefe del servicio de neonatología del hospital Vall d’Hebron de Barcelona, Félix Castillo. Los facultativos han confirmado que el recién nacido presenta «un perímetro craneal bajo», lo que confirma, tal y como avanzaban los estudios obstétricos durante la gestación, que sufre microcefalia.
A preguntas de los periodistas, Castillo ha precisado que una persona que sufre una grave malformación cerebral con un cerebro absolutamente ineficaz puede vivir muchos años, si no tiene dificultades para respirar y se nutre bien, pero si no puede coger infecciones y los riesgos aumentan.
El pequeño recibirá «el seguimiento de un niño con problemas neurológicos«, es decir, será tratado por un equipo multidisciplinar integrado por pediatras, neuropediatras, rehabilitzación, y oftalmología pediátrica, entre otros.
Desde principios de año se han registrado 91 afectados, de los cuales 24 son hombres y 67 son mujeres, de las que 21 son gestantes, cinco han dado a luz a bebés sanos y una a una criatura con microcefalia. Este ha sido el balance de casos de Zika que ha ofrecido el secretario de la Agencia de Salud Pública de Cataluña (ASPC), Joan Guix.
¿Qué es la microcefalia?
La microcefalia no es una enfermedad en sí misma sino la consecuencia de una enfermedad. Cuando ocurre, el niño nace con una cabeza pequeña, o la cabeza deja de crecer durante el desarrollo fetal en la gestación. Es un problema raro y se da en uno de cada mil recién nacidos.
¿Qué es y cómo se transmite el Zika?
La infección por el virus de Zika o Zikv se transmite por la picadura de mosquitos infectados del género Aedes, la misma a la que pertenece el mosquito denominado tigre, que popaga el dengue y el Chikungunya. Los síntomas son fiebre leve, erupciones, conjuntivitis y dolores musculares. También puede ocasionar dolor de cabeza y en las articulaciones, debilidad, inflamación en las manos y pies y edema en los miembros inferiores. Otros síntomas menos frecuentes: vómitos, diarrea, dolor abdominal y falta de apetito. Según la OMS, estos síntomas suelen durar entre 2 y 7 días.
La Organización Mundial de la Salud (OMS)declaró la emergencia por el virus Zika, no tanto por la enfermedad en sí misma, sino por su relación con la microcefalia en los recién nacidos. Asimismo, recomienda a las mujeres que han estado expuestas a este virus que aplacen su decisión de ser madres.
Aunque la transmisión requiere del mosquito para infectar a las personas, se ha documentado la vía sexual y también hay evidencia de transmisión por vía sanguínea, aunque ambos son mecanismos de propagación poco frecuentes.
Incluso, investigadores brasileños han identificaod el virus Zika en la saliva y en la orina humana, pudiendo servir estas vías para la transmisión de la enfernedad. Aunque, aún se está estudiando y no se ha demostrado.
Tratamiento del Zika
La enfermedad por el virus de Zika suele ser relativamente leve y no necesita tratamiento específico. Los pacientes deben estar en reposo, beber líquidos suficientes y tomar medicamentos comunes para el dolor y la fiebre. Si los síntomas empeoran deben consultar al médico. En la actualidad no hay vacunas.
Prevención del virus, según la OMS
Picaduras de mosquito
La protección contra las picaduras de mosquitos es fundamental para prevenir la infección por el virus de Zika. Para ello se puede usar ropa (preferiblemente de colores claros) que cubra al máximo el cuerpo, instalar barreras físicas (mosquiteros) en los edificios, mantener puertas y ventanas cerradas, dormir bajo mosquiteros de cama durante el día y utilizar repelentes de insectos que contengan DEET, IR3535 o icaridina, siguiendo las instrucciones de la ficha técnica del producto.
Hay que prestar especial atención y ayuda a quienes no puedan protegerse adecuadamente por sí mismos, como los niños pequeños, los enfermos o los ancianos. Los residentes en las zonas afectadas y quienes viajen a ellas deben tomar las precauciones descritas para protegerse de las picaduras de mosquitos.
Es importante vaciar, limpiar o cubrir regularmente los sitios que puedan acumular agua, como cubos, barriles, macetas, canalones y neumáticos usados. Las comunidades deben apoyar los esfuerzos de las autoridades locales por reducir los mosquitos. Las autoridades sanitarias pueden aconsejar la fumigación de insecticidas.
Transmisión sexual
La transmisión sexual del virus de Zika está documentada en varios países. Para reducir el riesgo de transmisión sexual y de posibles complicaciones del embarazo relacionadas con la infección, las parejas sexuales de embarazadas que vivan en zonas con transmisión local del virus o de retorno de esas zonas deben tener prácticas sexuales seguras, utilizando preservativos, o abstenerse de las relaciones sexuales durante el embarazo.
Quienes vivan en zonas con transmisión local del virus también deben tener prácticas sexuales seguras o abstenerse de las relaciones sexuales. Además, quienes estén de retorno de zonas con transmisión local del virus deben adoptar prácticas sexuales seguras o abstenerse de las relaciones sexuales durante un mínimo de 8 semanas tras el retorno, aunque no tengan síntomas, o durante un mínimo de 6 meses en el caso de los hombres sintomáticos.
Quienes quieran quedarse embarazadas deben esperar al menos 8 semanas antes de intentar la concepción en caso de que no aparezcan síntomas de infección por el virus de Zika, o 6 meses en caso de que uno o ambos miembros de la pareja tengan síntomas.
Origen: Uganda en 1947
Se identificó por primera vez en 1947 en Uganda, concretamente en los bosques de Zika, de ahí su denominación. El virus se encontró en un mono Rhesus mientras se estaba desarrollando un estudio sobre la transmisión de la fiebre amarilla. Pocos años después, en 1952, se confirmó la infección en seres humanos en Uganda y Tanzania.
En Latinoamerica
Los casos de microcefalia no eran tan frecuentes en el continente hasta el reciente brote de Zika. A partir de detectar este virus, muchas mujeres han tenido bebés con malformaciones congénitas. Brasil es uno de los países donde este problema se ha triplicado seguido de El Salvador y Colombia. En estos países las instituciones han sugerido a la población que eviten los embarazos hasta el año 2017.
EEUU
Por su parte, Norteamérica, desaconseja a las mujeres que planteen quedarse embarazadas o sospenchen estarlo que viajen a los 14 países latinoamericanos más afectados por el virus. Los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos han emitido una alerta de viaje de nivel 2 sobre 3 en la categoría «tomar precauciones forzadas» en Brasil, Colombia, El Salvador, la Guayana Francesa, Martinica, Guatemala, Haití, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Surinam, Venezuela y Puerto Rico.