El Mundo: El Rey ignora las provocaciones en el Mobile y apela a la «firme cooperación» institucional
La presencia del Rey y el boicot independentista organizado en la calle y entre las instituciones -ni el Ayuntamiento de Barcelona, ni el presidente del Parlament, Roger Torrent, ni la Generalitat acudieron a la recepción oficial- protagonizaron este domingo la cena de bienvenida al Mobile World Congress más agitada que se recuerda.
Las marchas independentistas paralizaron el centro de Barcelona en señal de reproche al Monarca por su discurso del 3 de octubre. Una estampa contraria al «clima de estabilidad y seguridad» que reclaman desde la GSMA, la entidad organizadora, para seguir en Barcelona con un evento que deja al año 471 millones de euros.
El País: La «resistencia pasiva» de los Comités de Defensa de la República
El sumario contra la cúpula secesionista de Cataluña dedica varios capítulos a los llamados Comités de Defensa de la República (CDR). Durante el proceso independentista se han erigido en el brazo ejecutor de las decisiones sobre movilización ciudadana adoptadas «por los organizadores del referéndum del 1 de octubre», según distintos informes del Ministerio del Interior incorporados al sumario que dirige el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena. Dentro de la estructura separatista, son los más activos y los encargados ahora, tras la aplicación del artículo 155, de mantener vivo el separatismo.
La Vanguardia: El Rey apela al compromiso de las instituciones para blindar el Mobile
Ni el plante institucional, ni las protestas de grupos independentistas ante la presencia del Rey en Barcelona, variaron el mensaje del jefe del Estado en la cena inaugural del Mobile World Congress (MWC): la necesidad de la colaboración institucional y el compromiso de todos los actores para que Barcelona siga proyectándose al mundo, blindando la celebración del congreso para los próximos años.
El Confidencial: Los correos electrónicos de Trapero revelan que los Mossos permitieron el referéndum
Los responsables de la policía autonómica catalana permitieron el referéndum del 1-O pese a haber podido evitarlo y saber que el Constitucional lo había declarado ilegal, según un informe de la Guardia Civil elaborado a partir de los correos electrónicos del exmayor Josep Lluís Trapero.