Este viernes Madrid mantendrá de forma ininterrumpida los cortes de tráfico en la Gran Vía entre el 23 de diciembre y el 8 de enero. Esta polémica medida, para disminuir la intensidad del tráfico en el centro de la capital, tiene importantes seguidores, pero también notables detractores, y es que ni siquiera los diferentes gremios afectados llegan a un acuerdo.
Comerciantes
Madrid Foro empresarial, la comunidad de empresarios madrileños, bajo la dirección de Hilario Alfaro, está a favor de la peatonalización permanente de la Gran Vía, porque «la mayoría de las experiencias de peatonalización, bien planificadas y bien ejecutadas, han contribuido a mejorar la actividad económica del área afectada». Además, Hilario Alfaro añade que «hoy ningún vecino ni comerciante de calles peatonales como Preciados, Montera o Arenal querría volver a la situación anterior».
Por su parte, la Asociación de Comerciantes de Gran Vía, presidida por Florencio Delgado, considera que la restricción al tráfico de Manuela Carmena ha perjudicado “terriblemente” el comercio del distrito centro. «Nos da la impresión de que lo que se pretende es colapsar el centro de Madrid para que los coches vayan a la periferia, a las grandes superficies, como si hubiera habido un contubernio», opina Florencio Delgado.
En una encuesta realizada por la OCDE, atendiendo a los procesos de peatonalización en Europa, Colonia (Alemania) informó de un aumento de ventas en un 20% de sus comercios; Copenhague, entre el 25% y el 40%, igual que la germana Múnich. Viena (Austria) también calculó un incremento en un 20% y el 70% de los negocios en Hamburgo ha informado de mejores ventas.
Aparcamientos
Los aparcamientos subterráneos, según Europa Press, son los que más sufren el cierre al tráfico del centro de Madrid. En concreto, la agencia de noticias habla de una caída en la clientela de más de un 30%; sin embargo, aquellos parkings con los que hemos podido contactar desde Te Interesa, como el de Fuencarral o Plaza España, hablan de una ocupación “similar a otros años” y esperan que estas fiestas se mantenga “más o menos igual”.
Independientemente de los resultados de ocupación logrados durante estos cortes, la mayoría de los aparcamientos de la zona centro de Madrid no ve con buenos ojos el proyecto que busca el cierre permanente de la Gran Vía ya que, previsiblemente, eso sí les afectaría de forma negativa, poniendo en peligro la supervivencia de varios de estos.
Tráfico
La medida de Carmena fue calificada de «verdadera barbaridad» por parte del PP, que consideraba que se iba a «colapsar la ciudad» y que Madrid se convertiría «en un infierno». En este sentido, la concejala del PP Inma Sanz calculó que serían necesarios 1.400 autobuses, para sustituir los 25.000 turismos que transitan cada día la vía, lo que preocupó a la Consejería de Transportes que declaró no haber recibido noticias “en ningún momento” del Ayuntamiento para avanzarles el posible refuerzo.
Como consecuencia el primer capítulo de cortes en la Gran Vía resultó algo caótico. Sin embargo, fuentes de la Policía Municipal han destacado, con respecto a los últimos cortes, “la tranquilidad” en el desarrollo de la jornada porque “muchos conductores ya lo sabían y han dejado los coches en casa o han utilizado el transporte público”. Una tranquilidad que previsiblemente se prolongue durante las navidades.
No obstante, hay que destacar que el mal tiempo del pasado fin de semana ha favorecido el congestionamiento de coches en el centro de la capital y la ausencia de peatones en los carriles de la Gran Vía habilitados para estos, aunque los principales problemas de tráfico se concentraron en la cuesta de San Vicente.
Por su parte, el concejal de Salud, Seguridad y Emergencias, Javier Barbero, no duda en defender los cortes al tráfico en la Gran Vía alegando que “existe un uso irracional e injustificado del coche”.
Medioambiente
Parece que en lo único en lo que todos están de acuerdo es en el drástico descenso de la contaminación en la capital tras los cortes de tráfico. Ecologistas en Acción ha realizado una estimación del impacto que dicha medida ha tenido sobre la calidad del aire en el entorno de esta avenida. Su conclusión: la reducción del tráfico ha supuesto una disminución en la contaminación de un 32% menos en la primera semana de cortes.