La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha confirmado este viernes que el Ejecutivo español dispone de un equipo de policía disponible para ser enviado a Nigeria y participar en la operación internacional de rescate de las más de 200 niñas nigerianas secuestradas por la organización terrorista islamista Boko Haram.
La portavoz del Ejecutivo, que también mostró “la más firme condena a un hecho deplorable desde todos los puntos de vista”, concretó que los ministerios de Asuntos Exteriores, Interior y Presidencia están trabajando con las autoridades del país “para ofrecerles colaboración”.
Así, el Gobierno espera a que las autoridades nigerianas acepten esta ayuda para poner en marcha el “posible envío” de un equipo “muy especializado” que ya está “preparado y a disposición” a la zona. Dicho equipo, según Sáenz de Santamaría, está compuesto por un inspector, un subinspector y dos policías de la Comisaría General de Extranjería y Fronteras, “que además son expertos en redes africanas y, en especial, nigerianas”. Según ha confirmado el Gobierno, estos cuatro policías contarían con el apoyo de la Unidad Central contra Redes de Inmigración y Falsedades en materia de Inteligencia.
El Ministerio de Exteriores español confirmó este jueves a Lainformacion.com que había ofrecido ayuda al Gobierno nigeriano, y que se mantenían a la espera de que éste «trasladara sus necesidades». En este sentido, también aseguraron estar «preparando el estudio de medidas desde el seno de la Unión Europea».
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la vicepresidenta se ha referido a este asunto después de que líderes políticos, activistas y celebridades de todo el mundo se movilizaran este jueves para exigir la liberación de las niñas secuestradas en Nigeria, donde esperan que la ayuda internacional prometida llegue pronto para poder rescatarlas.
Todavía se desconoce el paradero de las más de 200 niñas secuestradas el pasado 14 de abril en una escuela de Chibok, en el estado septentrional de Borno, y de otras 11 menores raptadas el pasado domingo en la misma zona. Boko Haram, que ha reivindicado el primer secuestro, aunque se le atribuye también el segundo, ha amenazado públicamente con esclavizar y vender a las niñas que, en su opinión, nunca tendrían que haber estado en un colegio.
Ante ese desafío, países como Estados Unidos, China, Francia, Reino Unido y Canadá ya han ofrecido ayuda a Nigeria con el fin de participar en la operación para liberar a las menores.