Mujer con nivel socioeconómico alto que vive en un municipio de entre 10.000 y 200.000 habitantes es el perfil mayoritario del voluntariado en España, una labor solidaria que realizan 2,2 millones de personas.
Son datos del informe «La Acción voluntaria en 2017: errores y creencias de la población española sobre el voluntariado», realizado con 1.500 entrevistas por la Plataforma del Voluntariado de España, que radiografía cómo son, qué opinan y por qué han escogido su labor quienes practican esta actividad altruista.
El 37 por ciento de los españoles colabora con una ONG, pero solo el 5,8 por ciento de la población española realiza labores como voluntarios, según pone de manifiesto el informe.
La nueva ley del voluntariado aprobada en 2015 marca los requisitos para considerar a una persona voluntaria: hacer esa labor dentro de una ONG y con cierta periodicidad, y saca por tanto de esa definición legal a muchas otras que hasta ahora eran consideradas como tales por prestar algún tipo de ayuda o labor solidaria pero sin pertenecer a una organización.
Por ello, la Plataforma ha aclarado que no se pueden comparar los 2,2 millones de voluntarios que hay actualmente con los 4 millones de los que se hablaba antes de la entrada en vigor de la ley, en los que se incluía como tarea voluntaria cualquier acción de ayuda vecinal.
De hecho, el informe revela que los ciudadanos no tienen claro qué es y qué no es voluntariado: cuatro de cada diez personas entrevistadas considera, por ejemplo, que realizar una donación -en dinero o especies- es hacer voluntariado.
«La solidaridad no ha disminuido, la gente sigue colaborando de diferentes maneras, donando ropa, sangre o dinero, o ayudando a sus vecinos, aunque esas acciones ya no sean consideradas como de voluntariado», ha explicado la directora de la Plataforma, Mar Amate.
El ámbito que concita mayor demanda es el social (el que ofrece atención directa a personas), seguido del sociosanitario y del educativo.
Seis cada diez voluntarios son mujeres y esta tarea voluntaria resulta más atractiva entre quienes tienen estudios superiores (38,3 %), un estatus socioeconómico alto o medio-alto (45,9 %), viven en familia (34,4 %) y colaboran con alguna ONG (37 %).
El informe pone de manifiesto el alto grado de confianza que genera el concepto de voluntariado: el 74 por ciento confía «mucho» o «bastante» en el voluntariado, y se eleva esa confianza hasta el 92 % cuando se les pregunta a los que conocen alguna organización.
Aunque el perfil mayoritario sea femenino (el 62 % frente al 38 % de los hombres), ellos son mayoría en el voluntariado relacionado con la cooperación, protección civil y deportivo, mientras que las mujeres lo realizan principalmente en el ámbito sociosanitario.
El presidente de la Plataforma, Luciano Poyato, ha destacado la importancia de que se conozcan otras formas de voluntariado, como el medioambiental «para hacer más sostenible el planeta».
Respecto al perfil general de la colaboración de la población española con las ONG, el informe muestra que el 63 % nunca lo hace.
Del 37 % que sí colabora con ONG, casi cuatro de cada diez lo hace con varias organizaciones sociales.
Por tipo de colaboración, cerca del 20 % lo hace como donante económico, un porcentaje similar como donante en especie, un 16 % como socio y el 5,8 % como voluntario.
«Hacer voluntariado es querer cambiar el mundo y los que no lo hacen se están perdiendo eso; detrás del voluntariado hay valores como la honestidad y querer compartir», ha concluido el responsable de esta Plataforma integrada por 79 organizaciones, entre ellas Cruz Roja y Cáritas.