El Ayuntamiento de Madrid rectifica, pero no admite las críticas. Después de que varios sindicatos y asociaciones de la Policía Municipal denunciaran que los agentes de más de 1,80 metros de altura no cabían en los vehículos recién adquiridos por la corporación, el Consistorio ordenó llamar a revisión a todos los coches que tenían mampara trasera para aislar a los detenidos. La Unidad de Vehículos y Señalización los inspeccionó y retiró un tope que impedía echar hacia atrás el carril del asiento, con lo que ahora los funcionarios más altos no tendrán problema para acceder a los coches.
La orden de revisar los vehículos comenzó a llegar a las distintas dependencias policiales de Madrid el pasado 21 de julio. Así lo pone de manifiesto, de hecho, un comunicado interno de la Asociación de Policía Municipal Unificada (APMU), al que ha tenido acceso Seguridad y Tribunales. Sin embargo, dos días después de que los coches fueran llamados, como denuncia el mismo escrito, el concejal de Seguridad, José Enrique Núñez, las denuncias realizadas por las asociaciones y los sindicatos durante un pleno municipal tras ser interpelado por el grupo de UPyD.
Los arreglos realizados en los vehículos deberían servir para que los agentes altos entraran bien a partir de ahora, según aseguran fuentes policiales. Las asociaciones y sindicatos dan la bienvenida a la revisión realizada por el consistorio aunque no entienden por qué se ha negado el problema en todo momento. «¿Por qué se ha modificado el carril si estaba todo correcto y se cabía perfectamente?», se preguntan desde APMU, cuyo comunicado critica que el concejal Núñez expusiera durante el pleno una foto en la que un agente estaba cómodamente sentado en el asiento de uno de los vehículos.
Bajo volumen de las sirenas
Este asunto, denunciado por Seguridad y Tribunales, ha conllevado numerosas quejas por parte de los policías. «Es necesario urgentemente modificar el volumen de las señales acústicas», insisten desde APMU, que admite que cumplen con la ordenanza pero que es sustancialmente más bajo que el de otras fuerzas de seguridad, como la Policía Nacional.
El Ayuntamiento renovó el pasado mes de junio un tercio de la flota de vehículos de la Policía Municipal de Madrid. En concreto, el consistorio adquirió 274 coches y 84 motos. APMU y el sindicato CSIT recopilan desde entonces una lista con posibles defectos a raíz de las quejas que les transmiten los propios agentes. Entre estos fallos están los mencionados de las sirenas y del espacio limitado en la cabina del vehículo.