Durante el acto de entrega, la titular del Ministerio ha afirmado que las actuaciones llevadas a cabo por la inspección de trabajo y Seguridad Social en la lucha contra el fraude desde 2012 ha permitido aflorar más de 491.000 empleos irregulares y detectar más de 6.700 empresas ficticias, que se crearon para facilitar el «acceso indebido a prestaciones».
Además, en este periodo también se han transformado más de 332.000 contratos temporales en indefinidos. En esta línea, Báñez ha destacado la importancia de reforzar las instituciones y dotarlas de mejores profesionales.
La ministra también ha puesto en valor el fortalecimiento de la inspección de trabajo y Seguridad Social y ha recordado que la creación de la nueva escala de subinspectores va a permitir «continuar avanzando con la prevención de riesgos laborales y la reducción de la siniestralidad laboral».
Para Báñez, es necesario seguir trabajando para lograr un mercado de trabajo «más justo» y para atajar las conductas que «atenten» contra los derechos de los trabajadores y contra la Seguridad social.
Por otro lado, ha hecho hincapié en la necesidad de avanzar en la mejora de la calidad del empleo, ya que cree que, pese a que la contratación indefinida «crece al doble que la temporal», es «preciso» avanzar para que haya empleos «más estables».