UGT cree que la última propuesta que ha lanzado el presidente de la patronal de la pequeña y mediana empresa (Cepyme) y vicepresidente de CEOE, Antonio Garamendi, de subir los salarios a cambio de reducir las cotizaciones sociales a cargo de las empresas es «una trampa».
Así lo ha señalado la organización que representa Pepe Álvarez, que también ha pedido a la patronal que deje de hacer «propuestas interesadas» y proponga una subida salarial para el próximo año «ya».
El sindicato considera que de cara a 2018 la subida de los salarios debería situarse en torno al 3%, atendiendo siempre a la situación concreta de cada empresa o sector, e incluyendo la cláusula de garantía salarial. También apuesta por aumentar de manera especial los salarios más bajos y situarlos en al menos los 1.000 euros mensuales.
En concreto, UGT ha afirmado que la propuesta de la patronal de rebajar las cotizaciones sociales que pagan las empresas y que permitiría bajar los costes laborales, y subir los salarios, «no puede suceder», porque las cotizaciones sociales que pagan las empresas son parte del salario del trabajador.
Esta parte del salario se conoce como salario diferido y es lo que el trabajador recibirá más adelante cuando necesite de las prestaciones que son sufragadas con los ingresos de estas cotizaciones, es decir, cuando necesite una prestación por enfermedad, desempleo, formación o jubilación.
En esta línea, el sindicato ha insistido en que se necesita que los sueldos crezcan de manera «nítida» y por encima de los precios para que aumente la demanda, las empresas vendan más y puedan crear más empleo, se eleven los ingresos de la Seguridad Social y se reduzcan las «inaceptables» bolsas de pobreza y la desigualdad existentes en España.
Para UGT, la patronal sigue manteniendo su discurso «anclado en la etapa de crisis, demandando más recortes y negando la subida de sueldos, a pesar de que los beneficios de las empresas no dejan de aumentar».
«La ausencia de justificación para este comportamiento está llevando a las organizaciones empresariales a plantear medidas no solo improcedentes e injustas en la situación económica y social actual, sino inconsistentes desde un punto de vista estrictamente técnico», ha subrayado el sindicato.
Además, también ha apuntado que la patronal «juega a la confusión de manera interesada» y que pretende hacer pasar por «una propuesta de subida de sueldos lo que en realidad es una propuesta de congelación a corto plazo y de reducción en el futuro».