El 60% de las empresas españolas afirma que la formación recibida por los universitarios españoles no es completa, especialmente en materia de idiomas, habilidades como la capacidad de negociación y de comunicación, o la gestión del estrés; y en actitudes la motivación, el nivel de disposición o la iniciativa. Y en lo que concierne a los universitarios, también en su formación práctica, algo que no sucede con los graduados de Formación Profesional.
Un negativo análisis sobre la formación recibida en el que los estudiantes, insatisfechos con el papel que ha jugado la universidad en su formación, dan la razón a los empleadores. «La sensación general entre los jóvenes -subraya el informe-, es de cierta decepción y desilusión cuando terminan sus estudios. No se trata tanto de una mala consideración de la formación teórica, sino más bien de la poca orientación laboral y utilidad de sus estudios para responder a las necesidades del mercado laboral».
Tan es así que el 61% de los alumnos de FP y el 72% de los de universidad dicen no saber cómo empezar a buscar empleo en su profesión. Y sólo el 1% de los estudiantes de Formación Profesional, el 10% en las universidades públicas y el 7% en las privadas afirma haber recibido asesoramiento sobre salidas profesionales y búsqueda de empleo en sus centros de estudios. Todos afirman mayoritariamente no saber lo suficiente sobre hacer un currículum, una carta de presentación, una entrevista de trabajo ni las diferentes pruebas de selección de personal como test psicotécnicos laborales o dinámicas de grupo.
Son datos que aparecen en el Informe OIE sobre jóvenes y mercado laboral, realizado por el Observatorio de Innovación en el Empleo, una iniciativa integrada por 19 grandes empresas y que está promovido por el grupo de recursos humanos Adecco.
No obstante, los alumnos de Formación Profesional tienen una percepción bastante más positiva sobre el mercado que los universitarios: el 36% de los de FP cree que no ha sido completa por el 56% de universitarios. Cuando hablan en concreto de las habilidades y competencias más demandadas por las empresas de hoy esos porcentajes son del 35% y del 52%.
En este apartado las empresas se muestran aún más insatisfechas con los universitarios: el 69% asegura que no están bien formados en esas habilidades sociales y competencias. En materia de idiomas son tres de cada cuatro los empleadores que piensan que tienen esa insuficiencia (en este caso, los de FP salen peor parados).