La Organización Internacional del Trabajo, OIT, un organismo de Naciones Unidas con sede en Ginebra (Suiza), ha hecho público su último informe sobre Perspectivas Laborales y Sociales en el Mundo, en el que dibuja un panorama nada halagüeño para el empleo en nuestro país.
Según este organismo, cuyo director general es desde 2012 Guy Ryder
, un británico que ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional en organizaciones sindicales internacionales , el desempleo en España no bajará del 21% hasta el año 2020. Hasta 2019, según las últimas estimaciones de la OIT todavía se mantendría en el 21,5%. Un vaticinio un tanto sorprendente en estas fechas para nuestro país, que más bien se acercan a la que manejaban la mayoría de los economistas hace un año o tan sólo unos meses y que han sido revisadas al alza en buena parte de los casos.Según la quiniela de la OIT para el empleo en España, donde su director es Joaquín Nieto, secretario confederal de medio ambiente y salud laboral Comisiones Obreras de 1998 a 2011, el paro en nuestro país terminará el presente año 2015 en el 23,6%. Pero ese altísimo aún porcentaje de desempleados ya se ha alcanzado en nuestro país en el tercer trimestre del recientemente concluido 2014. En la EPA de octubre fue del 23,65%. Para cumplirse el anuncio de la OIT en 2015 no debería reducirse nada el paro en España. Algo que parece en la actual dinámica poco probable.
Las previsiones de la asociación de agencias privadas de empleo de nuestro país, Asempleo, y de Analistas Financieros Internacionales (AFI), que han estado entre las más acertadas en nuestro país en los últimos años, apuntan a que en la próxima EPA, la referente al cuarto trimestre de 2014, que será presentada por el Instituto Nacional de Estadística este mismo jueves, la tasa de desocupados se mantendrá estable alrededor de ese 23,6%. Es decir, lo que puede ser mañana una realidad, no ya una previsión, lo sitúa la OIT como el pronóstico para nuestro país para dentro de 12 meses.
Lo dicho. Para que este organismo internacional estuviese en lo cierto nuestro país no debería reducir este año el paro, algo que en la dinámica actual parece difícil de cumplirse, siempre a expensas no obstante de que algún gran acontecimiento internacional pudiera suponer un inesperado freno. Los presidentes en España de las tres mayores firmas de recursos humanos de España, Randstad (Rodrigo Martín), ManpowerGroup (Raúl Grijalba) y Adecco (Enrique Sánchez), integrantes las tres de Asempleo, declaraban hace unos días en el diario Expansión un buen 2015 para el empleo en nuestro país.
El cierre de 2014 ya puede rectificar a la OIT este jueves
Pero este nuevo informe de la OIT no sólo contradice las previsiones de Asempleo y AFI. También la de la mayor parte de instituciones, expertos y organismos conocidas recientemente. Lógicamente, la economía no es una ciencia exacta y nadie puede adivinar lo que sucederá dentro de unos meses, cuanto más difícil es hacer quinielas a varios años vista. Pero los números que sigue manejando la OIT para España no parecen muy acordes a los datos actuales.
Ahora hay casi 5,5 millones de parados, que suponen la ya citada tasa de paro del 23,6%. Si durante el año 2015 se redujese el número de desempleados en unos 500.000, el nivel de desocupados se quedaría alrededor del 21,5%, décimas arriba o abajo en función de si crece o no la población activa.
Esos 500.000 nuevos puestos de trabajo son algunos más que los que se han creado en 2014, que ha sido un año todavía muy complejo económicamente hablando. En concreto, han sido el último año 417.000 los empleos generados según los datos de la Seguridad Social y casi 400.000 probablemente en la EPA que se hará pública el jueves. De cumplirse ese escenario, a finales de este mismo año España estaría a medio punto aproximadamente de bajar de ese 21% que menciona la OIT.
Las previsiones para 2015, cercanas a las de OIT para 2020
Economistas como Javier Díaz, de la escuela de negocios IESE Business School, consideran esa creación de medio millón de trabajos como algo factible. Habla incluso de más, hasta 700.000. Tambien Luis Pérez, director de relaciones institucionales del grupo de Randstad, cree que sumar entre 500.000 y 600.000 empleos este año es un objetivo perfectamente asumible por España en estos momentos.
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, adelantó este fin de semana que espera ganar entre 550.000 y 600.000 afiliados a la Seguridad Social en 2015. Puede considerarse una afirmación con aires electorales, pero lo cierto es que los últimos pronósticos del Ejecutivo dirigido en materia económica por Luis de Guindos se han visto incluso superados por la realidad en términos de empleo. Según el cuadro macroeconómico ese nivel de desempleo del 21% que la OIT prolonga hasta 2019, se reduciría mucho antes, en el año 2016 o 2017.
La OIT se ha mostrado reiteradamente contraria en los últimos años de la crisis a las políticas de austeridad, de devaluación salarial y la reforma laboral aplicadas en España. Pero más allá de las opiniones políticas de este organismo internacional, lo cierto es que sus datos y proyecciones futuras contradicen los de no pocas organizaciones no gubernamentales, sino económicas y empesariales.
La Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas), que no se ha caracterizado por un optimismo desmedido en sus previsiones, señalaba también hace ya medio año que España podía generar un millón de empleos entre 2014 y 2015. A los 400.000 del pasado año seguirían unos 600.000 en 2015, en línea con las nuevas estimaciones del Ejecutivo central.
Futuro a largo plazo
Uno de los informes más minuciosos sobre el comportamiento del empleo, el Índice Laboral ManpowerGroup, dirigido por el veterano catedrático de Economía Aplicada de la Universidad Autónoma de Barcelona, Josep Oliver, presentó hace escasamente un mes una proyección del mercado de trabajo en nuestro país para una década, desde 2013 a 2023. Ese informe, que tenía muy en cuenta la esperada caída de la población activa por la escasa natalidad de nuestro país, situaba el nivel de desempleo en 2023 entre el 7% (mejor de los escenarios) y el 15% (el escenario menos arriesgado).
También el Consejo Empresarial para la Competitividad (CEC), donde están las mayores empresas españolas, como Telefónica, Santander, Repsol, BBVA o Mango, entre otras, presentaba recientemente otro estudio en el que consideraba que en nuestro país la tasa de desempleo podría reducirse hasta el 15% o incluso el 10% en el año 2018.
Evidentemente, hasta el año 2020 puede pasar cualquier cosa en economía y resulta muy complicado hacer proyecciones a tan largo plazo. Pero los de la OIT para España parecen excesivamente pesimista y no realistas. Alejadas de la mayoría de las estimaciones, de lo que señalan incluso algunos datos ya oficiales, y de la presente tendencia económica.
Mejor que la OIT yerre de nuevo
Esperemos, por el bien de los desempleados y del bienestar general del país, que esta vez los pronósticos de la OIT sean tan poco acertados como los de 2009. En mayo de ese año vaticinaba que lo peor del paro en España ya había pasado y que el crecimiento del desempleo se ralentizaría. En ese medio año que restaba de 2009 nuestro país sumó medio millón de parados.