La iniciativa que lidera Francia, respaldada por Alemania, España e Italia, para que los gigantes de internet paguen impuestos en la UE por su actividad allí aunque no tengan su sede, es un paso transitorio, pero necesario por la urgencia, mientras se pone en marcha un dispositivo internacional.
Este es uno de los mensajes que el ministro francés de Economía y Finanzas, Bruno Le Maire, llevará al consejo informal con sus homólogos de la UE que se celebra mañana en Tallin, sobre una propuesta que hasta ahora ha recibido una acogida «positiva», según fuentes de su departamento.
La idea es tasar a las empresas del negocio digital que no tengan sede en países donde ejercen su actividad sobre la base de la facturación que realizan, algo que podría determinarse, por ejemplo, teniendo en cuenta el número de internautas o el número de «clics» en sus páginas web.
Las fuentes señalaron que no han empezando las discusiones sobre el tipo impositivo, pero que como la base imponible sería más amplia que en el impuesto de sociedades (se tendría en cuenta el volumen de negocios, no los beneficios) no pasaría de unos puntos porcentuales.
«No es una sanción»
El objetivo es que, aunque las empresas del universo digital no estén localizadas en Europa, tengan una carga fiscal por su actividad equivalente a la que pagarían en impuesto de sociedades si tuvieran sede en el Viejo Continente.
«No es un impuesto punitivo ni sancionador», según París, que reconoce que el dispositivo puede parecer «imperfecto», pero al mismo tiempo necesario mientras no haya una solución a escala internacional, que establezca unos estándares, y que todavía tardará.
El G20 encargó a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) que le presente en abril de 2018 un informe con propuestas para el problema de las empresas digitales que no pagan impuestos en muchos países donde hacen negocio.
Le Maire dijo a comienzos de semana que quiere que la iniciativa europea se pueda materializar en meses y no en años, y que espera que los jefes de Estado y de Gobierno de la UE examinen la cuestión en la cumbre de diciembre.
El departamento de Economía y Finanzas recordó que el presidente, Emmanuel Macron, ya ha mostrado su disposición a llevar la discusión al nivel de jefes de Estado y de Gobierno de la UE.