Este plan estratégico, aprobado en abril, pretende asegurar la viabilidad futura a través de su Plan Comercial y de Operaciones, que aspira dotar de suficiente carga de trabajo a todos los centros; el Plan de Eficiencia Operativa, con la transformación digital hacia el astillero 4.0; y el Plan de Rejuvenecimiento y de formación y nuevo convenio único, que permitirá unas 1.600 incorporaciones.
Según la compañía, «la nueva identidad corporativa transmite mejor la nueva realidad y estrategia de Navantia, con un posicionamiento de identidad visual más digital y moderna». «Nos permite evolucionar y adecuarnos a los tiempos actuales con una visión de futuro y sin perder el reconocimiento original de Navantia», ha abundado De Sarriá.
«ACERCARSE A LA INNOVACIÓN, LA TECNOLOGÍA Y LA DIGITALIZACIÓN»
El nuevo logo, explica la empresa, «respeta la esencia, el nombre y el símbolo, que representa la mar, el conocimiento y la experiencia de una empresa líder en el sector naval de defensa», y también «una actualización para acercarse al mundo de la innovación, la tecnología y la digitalización hacia el que Navantia se está transformando».
Así, desde la empresa remarcan que «se destaca la parte más racional de la ingeniería a través de un tono de color más vivo y eléctrico» y el «ajuste en el símbolo» se realiza con «trazos que combinan líneas curvas y rectas, expresando así el lado más humano y su carácter digital e industrial, con una nueva tipografía más racional y con mayor carácter».
«Ampliamos la identidad visual, yendo más allá del símbolo y logotipo, con una nueva gama cromática donde el verde cobrará protagonismo para representar nuestra firme orientación hacia la sostenibilidad y capacidad de diversificación», subrayan.
En la compañía consideran que «la nueva Navantia, a través de esta nueva identidad corporativa y con un potente sistema visual, será más fácilmente reconocible a nivel global en todos los medios y también aplicable de forma eficiente en los nuevos canales de comunicación, ya sean físicos o digitales».